La inquietante teoría de Elon Musk sobre la humanidad que pone en duda la existencia de la realidad y se parece a Matrix

A medida que la ciencia y la técnica avanzan la humanidad encuentra respuestas a las preguntas que rondan en la mente del hombre desde tiempos inmemoriales. ¿Quiénes somos?, ¿de dónde venimos?, ¿hacia dónde va la evolución? son algunos de los interrogantes que han sido respondido en parte a medida que el conocimiento.

Con el desarrollo de la tecnología, el saber se ha expandido y i la imaginación permite integrar creencias con nuevas realidades para ensayar respuestas nuevas a preguntas como si la realidad que nos rodea existe, o si todo es una ilusión.

En este sentido, en los últimos años se popularizó la "hipótesis de la simulación" que consiste en una teoría que propone que el entorno que nos rodea -el mundo y todo lo que hay en él- son producto de una realidad simulada. Uno de los fervientes adeptos a esta explicación es el multimillonario Elon Musk, quien no solo creen que nuestro entorno es una especie de realidad virtual, sino que lleva años defendiendo dicha postura.

¿Qué es la "hipótesis de la simulación" en la que cree Elon Musk?

El filósofo y transhumanista sueco Nick Bostrom planteó en el año 2003 su "Hipótesis de simulación", a través de la que postuló que las posibilidades de vivir en una realidad aparente no son tan remotas. Según Bostrom, cualquier civilización con tecnología suficientemente avanzada tendrá el potencial de generar experiencias virtuales indistinguibles de la realidad física.

Así, Bostrom establece 3 posibles alternativas:

1. Que no existan civilizaciones con tal nivel tecnológico.
2. Que existan pero ninguna esté interesada en simular la realidad.
3. Que existan y, además, hayan desarrollado entornos de realidad simulada.

Según la concepción actual de Bostrom, teniendo en cuenta que los humanos ya somos capaces de generar sistemas virtuales cada vez más desarrollados y avanzados, no sería descabellado pensar que el universo entero es en sí mismo un escenario ideado por seres de otra dimensión.

Desde la web de Fundación Gnosis profundizan el planteo de Bostrom y ejemplifican la lógica puesta detrás del pesnamiento del sueco. Dentro de una simulación podrían darse las condiciones necesarias para generar a su vez entornos virtuales, lo que llevaría a que el proceso se replique de forma recursiva dando lugar a muchos niveles de realidad encajados como muñecas rusas.

Visto desde un punto de vista de probabilidades, si una civilización más avanzada puede ejecutar incontables realidades simuladas, hay muchas más opciones de estar en una de ellas que en la única realidad "auténtica".

Elon Musk cree que estamos sumergidos en la hipótesis de la simulación

Las excentricidades del multimillonario sudafricano Elon Musk son bien conocidas. El dueño de Tesla, Space X, la red social X (ex Twitter), Neuralink entre otras, tiene tendencias a realizar acciones por demás particulares y que no dejan de sorprender.

Desde nombrar a su hijo con números y símbolos ajenos al alfabeto, hasta obsesionarse con la vida en Marte, hay varios motivos por los que el extravagante empresario se convirtió en adepto a la cosmovisión que plantea la hipótesis de la simulación.

Musk cree que el planeta, las galaxias y el universo entero son sistemas simulados por alguna suerte de inteligencia superior o artificial y llegó a postular en una exposicón que "Probablemente todos los seres humanos estamos atrapados en una pseudo existencia similar a la que postula la película "Matrix".

El sudafricano defiende este postulado en público desde 2016 y sostiene que "El argumento más fuerte para que estemos en una simulación es el siguiente: Hace 40 años creábamos el juego Pong como dos rectángulos y un punto. Eso era lo que eran los juegos".

"Ahora, 40 años después, tenemos simulaciones 3D fotorrealistas con millones de personas jugando simultáneamente y está mejorando cada año y pronto tendremos realidad virtual o realidad aumentada", justificó.

Según él, el ritmo actual del avance tecnológico significa que en el futuro los videojuegos serán "indistinguibles de la realidad". Sugirió también que "los humanos podrán crear sus propias realidades en el futuro".

"O vamos a crear simulaciones que sean indistinguibles de la realidad o la civilización dejará de existir. Esas son las dos opciones", agregó.