Pidieron la detención de los tres policías que asesinaron a Lucas González

Los fiscales que investigan el caso consideraron que «tergiversaron los hechos al momento de informarlos a la autoridad judicial para mejorar su situación procesal» y que podrían «amedrentar y hostigar a la familia» estando en libertad.

A tres días de su asesinato, los fiscales que investigan la muerte de Lucas González pidieron la detención de los tres agentes de la Policía de la Ciudad implicados en el operativo que culminó con la vida del adolescente de 17 años en el barrio de Barracas.

En principio, se trata del inspector Gabriel Isassi, el oficial mayor Fabián López y el oficial José Nievas, quienes eran parte de la brigada de Sumarios e Investigaciones de la Comuna 4 de la Policía de la Ciudad, y de esta manera, fueron acusados del delito de «homicidio agravado por haber sido perpetrado por miembros de las fuerzas policiales abusando de sus funciones».

Así, están seriamente comprometidos a enfrentar la pena de prisión perpetua en un futuro juicio oral, luego de que anoche los fiscales Leonel Gómez Barbella, a cargo de la fiscalía nacional en lo Criminal y Correccional 32, y el fiscal Andrés Heim, a cargo de la Procuraduría de Violencia Institucional (Procuvin) enviaran la solicitud.

Habló el abogado de los policías de la Ciudad acusados de matar a Lucas González:
«En solo cinco horas se solicitó una batería de medidas y se pidió la detención de los tres policías», contó una fuente judicial, que confió que ahora el juez Del Viso debe avalar lo solicitado por el fiscal, luego de rechazarlo en otra oportunidad, según informó Télam.

En este sentido, los fiscales también solicitaron que se dicte el secreto de sumario y rechazaron las eximiciones de prisión que habían implorado los tres homicidas a través de su abogado, Alfredo Oliván.

«Tergiversaron los hechos al momento de informarlos a la autoridad judicial para mejorar su situación procesal, circunstancia que daría cuenta no solo de su voluntad de sustraerse del proceso penal que se le sigue, sino también entorpecer la investigación», consideraron el fiscal Gómez Barbella y el fiscal Heim.

Además, analizaron que, en libertad, los policías pueden «amedrentar y hostigar a testigos y familiares, mas aún conociendo los pormenores de un proceso penal por la función propia», e informaron: «Cabe destacar que este riesgo se torna especialmente grave en investigaciones vinculadas a delitos como los que nos convocan, en los cuales no pueden descartarse que, por su entidad, haya causado repercusiones psíquicas en las víctimas, que impacten negativamente sobre su voluntad de colaborar y testimoniar en el marco de la investigación, en caso de que la libertad de los imputados no sea restringida de momento».