En el día del gato, López Murphy le respondió a Javier Milei, pero ser víctima no transforma a alguien en héroe
En la noche del lunes, el presidente Javier Milei se refirió al diputado Ricardo López Murphy en términos insultantes. Este martes, el ex ministro de De La Rúa le respondió, mientras continúan las políticas de ajuste, que ambos aspiran.
Javier Milei sigue en campaña. En público se refirió a Ricardo López Murphy como traidor y basura.
!Y vos qué miras!
El presidente Javier Milei insulta. Días atrás contra Lali Espósito, exitosa cantante, compositora, actriz. Ante tres personajes del periodismo nacional, Maujl, Trebuc y Rossi, en una ¿entrevista? en Casa Rosada, quiso descalificarla, cambiándole el apellido. De Espósito a "Depósito". Probablemente buscó una rima para insultarla y no le alcanzó la creatividad. Acudió a un recurso que, de hacerlo un niño de 4 o 5 años, sería reprendido, por la intención y por la ausencia de astucia léxica. Único adjetivo posible: ridículo.
El día internacional del gato. Uno de los tantos (días)
Tres fechas han sido designadas como "día internacional del gato". La primera incógnita es ¿por qué internacional? Respuesta ordinaria: porque si ocurre en Estados Unidos, ellos se encargan de asignarle esa categoría, y si el resto lo celebra, se consagra la pretensión. Asimismo vale aclarar que estas fechas son por el felino, por la mascota, porque la palabra gato designa un sin fin de cuestiones distintas.
Astutos pero discretos
Específicamente el 20 de febrero, es para evocar al gato que estuvo en el Salón Oval de la casa Blanca, mientras Bill Clinton la ocupó. Seguramente ese gato se fue a la tumba con inconfesables secretos del demócrata y su secretaria. Justamente una cualidad que se destaca a este animal, adorado desde el antiguo Egipto, es la discreción
Como perros y gatos
El estilo de Javier Milei encaja a la perfección con la alusión a la antinomia entre caninos y felinos. Aunque los hay voraces, generalmente, ambos conviven y acaso se profieren ladridos y amenazas, similar a lo que hace el presidente. En esa lucha verbal, sólo denosta a adversarios ocasionales, pero no enfrenta los problemas concretos, duros, dramáticos que atraviesa la Argentina. Y en estos fatigosos 70 días, va consolidando contradicciones y perjuicios como ningún otro presidente en nuestra historia.
El deshonrado
Ricardo Hipólito López Murphy fue bautizado así porque su padre era un conocido dirigente radical, policía. Notable. Ricardo, por Balbín, Hipólito, por Yrigoyen. Pero no fue la lealtad al ideario de la Unión Cívica Radical lo que lo catapultó. Estudió, se graduó, viajó a Estados Unidos. La primera designación a un cargo en el Estado lo consiguió durante la dictadura genocida en 1976. Congeniaba con ese liberalismo tan peculiar que eliminaba el Estado de Derecho. Liberalismo que mataba compatriotas sin juicio, los torturaba, los desaparecía y si podía, se apropiaba de criaturas.
Ministro de defensa y efímero ajustador
Una importante trayectoria como economista, consultor de entidades financieras internacionales (BID, Banco Mundial, FMI) lo llevaron a la consideración de las élites políticas y de 1999 al 2001 se desempeñó como Ministro de Defensa. En Marzo del 2001, ante el descalabro político, social, económico del gobierno de De La Rúa, pasó de Defensa a Economía. Éxito acelerado. Con sus ideas ajustadoras, también responsabilizando al déficit fiscal por la crisis indómita, duró 15 días en el cargo. La traducción literal del vocablo latino "éxit" es "salida", sí, los angloparlantes también se apropiaron de ese término.
Elecciones 2003, hace un ratito
Mientras Milei trataba de convencer a los futuros jubilados de que adhirieran a la AFJP Máxima, López Murphy compitió por la presidencia. El exponente más clásico del neoliberalismo prolijo y con aspecto marcial de esas elecciones fue López Murphy .Quedó tercero, nada despreciable 18% luego de haber sido protagonista del gobierno que propició un eslogan social "que se vayan todos". Por entonces, también como entre 2016 y 2019, compartía ideas y espacios con Patricia Bullrich, y así vamos sumando trebejos al tablero de los recurrentes fracasos de la Argentina.
El zoológico partidario y la ley de la selva
Los motivos de los improperios del presidente Milei a López Murphy están claros. El ex radical, apodado bulldog, en las elecciones anteriores, amagó con ir de la mano con el libertario, pero luego prefirió el calor del PRO, a pesar de que a su referente máximo lo trataran de "Macrigato". Y ahora, en el tratamiento de la frustrada Ley Ómnibus, López Murphy jugó como todo el bloque de "Hacemos coalición federal", un muestrario de nombres y figuras que demandaría un siglo explicar. Pero no le aprobaron a libro cerrado como Milei pretendía, eso los deposita inexorablemente en el averno.
Recuerdos del olvido
A los ojos del filósofo hispano norteamericano Santayana, los argentinos somos amnésicos. Santayana es el autor de la categórica sentencia: "aquellos que no pueden recordar el pasado están condenados a repetirlo".
Cuando vemos que hoy llegan del Fondo Monetario Internacional a monitorear las decisiones económicas, en simultáneo el ministro de relaciones exteriores de Gran Bretaña visita Malvinas en un acto de provocadora irreverencia; se desata una recesión impresionante; se multiplican los despidos;y la cantidad de población pobre supera con creces a los que tienen para transitar los días con alguna decencia, es inevitable evocar el fatídico y trágico 2001
Fabio Serpa, no sé, pero Einstein : tiene razón
Fue el candidato de la Libertad Avanza quien repetía como plegaria el concepto atribuido a Albert Einstein que dice "si se hace lo mismo y con los mismos elementos, de la misma manera, no se puede pretender un resultado diferente al conocido", no es literal, pero la idea no ofrece ambigüedad. Milei se encargaba de modificar lo de los "elementos" por "personas". O sea, con las mismas personas los resultados no podrán ser mejores. Acto seguido, una vez ungido, armó gabinete y se asoció con muchos de los protagonistas de las debacles sucesivas de la política de Argentina.
La atmósfera es implacable, no sabe fingir
El clima que se lee a través de los medios y que transita por las redes, no refleja, necesariamente, lo que ocurre fuera del escenario mediático digital. En los almacenes, en las oficinas, en las paradas de colectivos, en la espera del cajero, en la previa de la cancha, en el sanatorio, se respira desazón y temor.
Invertir no significa especular
Lejos del entusiasmo que despiertan los procesos flamantes, y más si tienen alguna característica innovadora, la decepción se respira en la rutina. La realidad cotidiana impone repensar estrategias ,ya no de progreso sino, de supervivencia, de cómo mantener el estatus previo.
La aflicción de tener que calcular febrilmente cada compra, cómo pagar los servicios, cómo atajar los intereses discrecionales sobre las deudas, cómo alimentar y educar a la familia, y qué panorama imaginar con la inflación -inflación que se incrementó de manera fenomenal en estos 70 días- afectan mucho más que esa cuestión registrable, que esa planilla de cálculo-
Escuchar lo vacuo de los pronunciamientos, y observar la innecesaria hostilidad desde el cargo máximo de la República, convierte en inevitable la inquietud, y la pregunta obligada es ¿quieren revertir esto? ¿tienen la intención de invertir, o sea, dar vuelta la dramática situación y convertirla en un proceso, al menos, respirable? La más vertiginosa de las incertidumbres es ¿tienen noción de lo mal que se está viviendo? Un dato que se suma al clima ominoso es que, además de amenazar al espíritu colectivo, aplasta la iniciativa individual, eso que tanto pregonan los mismos que están disolviendo la esperanza de vastos sectores.
Volvamos con las mascotas
A propósito de la fecha, día internacional del gato, nos asalta un recuerdo patético de una época que guarda una similitud preocupante. En 1996, un episodio que nunca podremos distinguir si fue transmitido por televisión o producido para televisión, repugnaba a la sociedad y a la vez, invitaba a la reflexión temprana. En Rosario, habían montado, en plena calle de un barrio marginal, una parrilla y en dos mástiles, exhibían las cabezas de dos gatos. Pudo ser una espantosa puesta en escena, pero de todas maneras, ponía en evidencia las desproporciones de un modelo, modelo que inspira a quienes gobiernan hoy
Las antinomias describen, pero no definen
- Que Javier Milei agravie a alguien, como fue con Lali Espósito, expone la ausencia de ubicuidad, pero eso no provocará ni mejor arte, ni una política eficaz.
- Que Javier Milei mencione y se posicione en las antípodas de Antonio Gramsci, no devela algo,sólo gestiona dudas, resulta improbable que lo haya leído, y si acaso lo hizo, hay probabilidad de que no lo haya comprendido.
- Que el presidente se refiera al Congreso como "un nido de ratas", no lo transforma en un paladín anti roedores, sólo revela el desprecio que tiene por el sistema republicano
- Que el presidente diga de los gobernadores que son delincuentes, no lo enaltece y de paso, ya es momento para que algún fiscal actúe de oficio e inicie un proceso, porque la calificación "delincuente" denota la acción de delito, o sea, contrario a derecho ¿y?
- Que Javier Milei se refiriese a López Murphy como "traidor" y "basura", no exime al afectado de su trayectoria, de sus acciones durante los gobiernos de la Alianza, ni de su rol como legislador, y además se agrega una preocupación, siguiendo las conductas del presidente Milei. Si a Caputo que trató de "timbero" y "fracasado" le dio para que maneje la economía del país; a Bullrich la adjetivó como terrorista, y le dio el máximo rango en seguridad interior de la Argentina, hay indicios que que en cualquier momento, designe a López Murphy como responsable de Ambiente (por lo de basura) o como Secretario de la Presidencia (por su condición de traidor).
Invitación personal
Así como después de burlarse del anterior gobierno, por otorgar incentivos a distintas actividades y por disponer de paliativos a los sectores más vulnerados (plan platita) la actual gestión, implementa "Plan simple", que es como el "Ahora 12", pero menos beneficioso; de la misma manera que otorga bonos, y ahora el refuerzo escolar, medidas que destacamos por el alivio que producen (aunque sea mínimo, precario y perentorio), quisiéramos que toda la fauna vernácula promueva un ecosistema, fuera de las pantallas y exento de algoritmos, para disminuir las penurias, o sea, la pobreza, y para morigerar el sentimiento generalizado de zozobra y angustia, que si deja un ratito de postear en la X y de ocultar la papada en Tik Tok, podrá notarlo.