EXPORTACIONES Y RETROCESO

Un buen dato que deprime y consolida el modelo económico

La propia Confederación Argentina de la Mediana Empresa CAME muestra el tímido índice de crecimiento de las exportaciones, pero a la vez, el deterioro que sufre la industria y el comercio.

Una sonrisa de Gioconda podría exhibir la CAME con el dato de incremento de exportaciones.

El balance que surge del MEP (Monitoreo de Exportaciones PyME) analiza 16 rubros de productos que se exportan. Los aranceles son diferentes, pero todos están contemplados en la Nomenclatura Común del Mercosur, enmienda 2024. Hubo un crecimiento en el primer trimestre, pero la composición de lo exportado devela cuál es el rumbo y el diseño económico de la gestión actual. Son más los rubros que caen que los que se eximen

Un modelo de economía concentrada

En la comparación entre el primer trimestre 2023 y el mismo segmento 2024, marca una evolución del 2% (dos por ciento) en las exportaciones del sector PyME, que representa el 12,2% del total exportado. O sea, el 87.8% de las exportaciones de Argentina lo concentran algo más de 550 empresas.

Diseño de primarización y extractivista

Dentro de los 16 rubros analizados, no es anecdóticos observar cuales fueron los que empujan la mejora y cuánto aportan. Mientras mayor peso ganan los ingresos por la exportación de materia prima, con escasos procesamientos y poca intervención de mano de obra e inteligencia humana, más dependientes de la naturaleza, la suerte y la buena voluntad de los mercados, tres de las cuatro variables son ajenas a la capacidad de las propias empresas y a la calidad del empleo.

Nada los conforma

La baja incidencia de las PyME en las exportaciones, y la desproporción que se nota este año, entre quienes exportan bienes de bajo impacto en la generación de empleos, de poca factura y además, de recursos no renovables, impide optimismo en cualquier país que se precie de soberano. Los beneficios afectan a un sector muy pequeño, el destino de esos beneficios no tiene implicancias en el consumo interno, léase, en la capacidad de compra del merca local, y más temprano que tarde, es un método que se agota

La energía y los alimentos

Los dos rubros que consiguen compensar las caídas notorias de exportaciones de las PyME industriales, se sintetizan en : alimentos sin procesar, que crecieron 14,3% y el boom de Petróleo y Combustibles, que creció en el caso de las pequeñas y medianas empresas, 80.7% sí, ochenta por ciento, pero antes de festejar, veamos cuál es el share que representan ambos rubros en el total de exportaciones.

Para no comerse el amague, los alimentos de las PyME

El 14.3% de incremento de exportaciones en alimentos sin procesar, se explica por el crecimiento de 6,8% más en volumen de toneladas. Obvio, la diferencia entre ambos indicadores obedece al tema precios, precios que al mejorar condiciones en el exterior, inducen a los incrementos para el mercado interno. El dato -para los amadores de la macro- es que en este caso, el de los alimentos sin procesar, sí tienen protagonismo las PyMES, que ostentan el 57% de las exportaciones de los alimentos sin procesar, en su gran mayoría se trata -y que nadie se de por aludido- comida para los chanchos.

Pará y pasalo a nafta

El otro rubro de crecimiento extraordinario fue el de Petróleo y combustibles, pero igual habrá que empujar. El incremento interanual es interesante. Las PyME involucradas en el rubro Petróleo y Combustible, lograron un incremento que superó por poco el 80%. Detenerse aquí es una obligación -y no para ahorrar combustible- sino para observar las otras variables. La odiosa pero indispensable comparación, precios de combustibles y variación del tipo de cambio (valor dólar)

  • Marzo 2023 precio Dólar oficial para la venta $ 215,50
  • Marzo 2023 Litro gasoil premium $ 292,10 (U$U 1.35)
  • Marzo 2024 precio Dólar oficial para la venta $ 876
  • Marzo 2024 Litro gasoil premium $ 1.140,33 (U$U 1.30)

Como puede verse en el informe MEP de CAME, las PYME del sector facturaron 80% más en el trimestre 2024 que idéntico período 2023, pero el volumen exportado en litros/kilos fue del 109%, Esta cuenta es significativa, fundamentalmente cuando algunos economistas falsean datos y transmiten esa usual y cómoda reflexión haciendo análogas las decisiones de la economía hogareña con la economía de una Nación. Rotundamente falso. 

La aritmética de algunos medios

Si se exportó 109% más de productos (crudo y procesado), debiese haber ingresado 109% más de divisas, no 80.7%, si las cuentas fueran como en casa. Y a esto, otro dato que engrosa la adulteración intencional de economistas y medios. Además de la diferencia del 29% entre producto y dólares, hay que agregar la variación del valor internacional del barril. Esto torna más compleja la explicación simple.

  • Barril de Petróleo Marzo 2023 U$U 78.45
  • Barril de Petróleo Marzo 2024 U$U 84,12
  • Variación: +7.5% en el precio.

Algo no está funcionando bien

Como se puede observar, a la brecha del 29% entre facturación (ingresos de divisas) y volumen de exportación, hay que sumarle 7,5% del incremento del precio del barril (valor internacional en el que la Argentina no incide) por lo que la brecha se amplía y alcanza en porcentajes lineales el 36,5% de diferencia. Si estos datos inquietan, falta aún el que más debería encender la atención de toda la sociedad. Las PyME, en el rubro Petróleo y Combustibles, en exportaciones, representan en el rubro el 0,6% del volumen total de lo que se exporta.

Avanzando rápidamente hacia el pasado

La cuenta inexplicable en el rubro más sensible de la actualidad, en todo el Planeta como es el de la energía, en este caso Petróleo y Combustibles, es una muestra del modelo vigente. Beneficios elevados para muy pocos, perjuicio cotidiano para la comunidad. Concentración y ausencia de oferta para empleos calificados.

Con razón lo de mayo

El crecimiento escueto y además, únicamente sostenido por commodities, atenta contra el pretendido desarrollo de Nación. Fomentar las exportaciones primarias, sin agregar valor, y eximir de impuestos a los grandes especuladores, incentivar la cartelización de los pocos grandes actores y a la vez, gravar con impuesto a las ganancias a los trabajadores calificados, es un formidable estímulo para repasar la Historia de la Argentina, que jamás fue primera potencia mundial, como suele mentir el presidente, pero sí fue una Nación soberana, con desarrollo industrial, científico, tecnológico, educativo, laboral, obrero e intelectual,  y una sociedad orgullosa de pertenecer.

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