Algo funciona muy mal pero no se nota en una Mendoza aparente
Resulta imposible acceder a información fehaciente desde los órganos estatales de Mendoza. Sucesos graves de toda índole, ocultos. Procesos judiciales defectuosos o amañados Las respuestas de los funcionarios se agotan en enojos, silencios y cuando pueden, represalias.
En la Mendoza aparente todo va sobre rieles, en la otra, lo cotidiano, la inseguridad y la justicia, no cierran
Se escuchaban gritos. En el mismo penal que el domingo anterior, un hombre arremetió con su camión contra un portón de ingreso, con la manifiesta intención de rescatar a un primo, detenido por una denuncia de violencia de género, este domingo, un interno quiso quitarse la vida. Decir "interno" en vez de "persona" es un eufemismo para quitarle dramatismo a lo que padecen quienes están privados de la libertad y en muchos casos, sin razón suficiente
Parte oficial
Asumiendo la segura represalia, nos resulta obligatorio indicar que la información que hacen circular desde algunos organismos, es escasa cuando no inexistente o peor, defectuosa. Dos áreas sensibles como el Ministerio Público Fiscal y el Ministerio de Seguridad y Justicia, en vez de manifestar su enojo y castigar con silencio a quienes piden información, deberían mejorar su prestación, también en lo comunicacional. Los errores, incluidos los aritméticos, despiertan inevitables suspicacias, acá la demostración fáctica de lo que hablamos, captura de pantalla de correos que envían
La aspiración de un sistema Judicial eficiente
Además de absurdo, torpe y temerario sería decir que en Mendoza todo el servicio de Justicia falla siempre. La abundancia de denuncias sobre delitos sobre la integridad sexual mantiene a gran parte del sistema saturado, y a gran parte de las víctimas, también. Víctimas de abusos y violaciones, y víctimas de falsas denuncias y de un sistema judicial que no parece muy justo, ni ecuánime, tampoco equitativo y en demasiadas ocasiones, sin apuro
Dudas, ninguna precisión
El viernes, una jueza rechazó lo que la abogada patrocinante de la presunta víctima de los rugbiers franceses pedía. No le fue concedido aportar como prueba que la denunciante no padece la enfermedad de von Willebrand, según certifican dos médicos. La importancia de esta prueba es que la denunciante tenía 15 lesiones evidentes, acreditadas, que la defensa de los galos minimizó aludiendo que poseía dicha enfermedad, por lo que los hematomas serían sólo por contacto algo brusco. Aunque seguramente apelarán esta decisión de la jueza el contraste de criterio frente a casos que involucran a comprovincianos es innegable y preocupante. Siendo que los imputados gozan de libertad total, en su país de origen y continuando con sus actividades, extraña porqué no aceptar una prueba
Cuidar a los implicados directos
No habrá precisión ni datos para no revictimizar a la (presunta) víctima de abuso y tampoco a la (presunta) víctima de falsa denuncia. Sí es recomendable -para sumarnos a la moda- entender que todo el despliegue que requiere investigar, peritar, imputar, procesar, contemplando derechos (no siempre cumplidos) absorbe además de energía, dineros. Dineros que son soportados por los contribuyentes que sí pagan impuestos, jamás alcanzados por blanqueos
Por caso, un caso (más)
Un varón decide interrumpir una relación de convivencia con su pareja. La mujer había tenido un embarazo anembrionario y eso pudo desatar una distancia afectiva. Poco más de un año la mujer residió junto a su pareja, en la casa de éste. Cuando deciden desvincularse, la mujer le pide una especie de indemnización, para abandonar la casa. La vivienda y todos los bienes eran del varón y adquiridos previo a la relación. Acuerdan una serie de pagos mensuales hasta completar una cifra. Una vez que canceló el pago de la última cuota, la mujer realizó una denuncia por abuso sexual. Según la denunciante, el hecho en cuestión había sucedido muchos meses antes. La denuncia prosperó, sin que existiese algún atisbo de prueba
La desventaja de ser argentino
El hombre se sometió a todo lo que le indicaron, asimismo fue, luego de imputado, privado de su libertad durante siete meses. La presunción de inocencia, como en los muchos casos que hemos abordado aquí, en Mendoza no cuenta. Los exámenes y luego los informes periciales arrojaron resultados contundentes. El relato de la denunciante no era verosímil. De los dos órganos dependientes del Estado, el EDEAAS y el EPI surgió el informe que coincidía con lo que sostenía la defensa y en coincidencia con los peritos de parte. Entre las pruebas que aportó el denunciante, un audio de más de 20 minutos, que refleja una conversación entre la denunciante y el denunciado, no ha sido tenido en cuenta lo suficiente, y peor aún, tampoco alguien impulsó -un fiscal, de oficio- una investigación por supuesta extorsión. Mal podríamos abrir juicio, aquí, pero es tan rotundo el contenido que no indagar al respecto sólo obedece a la desidia, en el mejor de los casos
¿Ya concluyó?
Este caso data de 2019 (Expediente P765789/19). Ya tuvo un archivo y volvió a abrirse. Hoy no sólo no se ha expedido la Justicia para culminar con el proceso que al imputado le ha provocado los perjuicios que cualquiera puede imaginar, sino que ahora, el abogado querellante, invocando dudas sobre la idoneidad u honestidad de los informes periciales de los entes del Estado, reclama nuevas pericias. Cinco años, no unos meses, como en el caso de los rugbiers franceses, en donde se duda de los propios informes del Ministerio Público Fiscal. En el caso de la denunciante de los galos, le rechazan agregar prueba, en este caso, dilatan la situación y piden repetir pruebas que han sido contundentes. En el caso de los extranjeros, filtran que la definición será el sobreseimiento. En casos, como en el de los primos Madaf, y la mayoría de quienes deben ser liberados porque se vencen los plazos de prisión preventiva, absolución, por falta de pruebas. El peso del pasaporte es determinante, según puede especularse
Noticias incompletas y otro asesinato en la Mendoza cotidiana
Mientras que por la mañana, bien temprano un hombre recientemente recluido en el penal de San Felipe se arrojó de una altura considerable y antes escribió algunos mensajes para sus hijos, despidiéndose, aún al cierre de este artículo no existe ninguna información ni parte que ponga en conocimiento público sobre esa situación ni cómo prospera quien fue trasladado de urgencia. En el mismo ejido urbano, pero en el barrio 28 de mayo, en Cruz de Piedra, Maipú, el joven Diego Esteban Aguilera Jofré murió impactado por un arma de fuego. Hubo otros heridos, y todo ocurre en la Mendoza rutinaria, mientras en la Mendoza aparente abundarán las explicaciones sobre los antecedentes de víctimas y victimarios, como si eso resolviera los problemas: Las soluciones no aparecen y la gravedad de situaciones dramáticas, cada vez más frecuentes, no encuentran solución, apenas un muy buen decorado y un maquillaje que esconde con elegancia la verdad