Inesperada víspera del 24 de marzo
El domingo 24 de marzo, una convocatoria con carácter obligatorio. Madres, Abuelas, Hijos, CGT, CTA, Organizaciones, familias. Todas y todos ganando plazas y calles de toda la Argentina
Impensada víspera del 24 de marzo
En estas vísperas del 24 de marzo, jornada para consolidar la memoria, para acercarnos a la verdad e intentar un país justo, nos descubrimos nuevamente amenazados por lo que creímos superado.
Esta vez, sin la irrupción ilegal
En esta ocasión, desprovistos de uniformes, sin balas arteras y utilizando las herramientas y permisos que generosamente otorga la democracia, las mismas ideas se apoderan del Estado, aunque con parte del elenco renovado. Quizá no compartan el ADN, pero sí el propósito.
Pelea de cabotaje entre la tripulación
Durante los últimos días asistimos a un combate entre dos del mismo gobierno, que disputan quién es más temeraria y cual tiene mayor capacidad de adulterar la historia reciente, para darle curso a ideas tan malas como anacrónicas.
Villarruel vs. Bullrich, pero no es la de fondo
La vicepresidenta, Victoria Villarruel ,llegó al ring acompañando a Javier Milei, primero en la Cámara Baja, luego en la Alta, y desde siempre ha exhibido su apego a la dictadura genocida. Es comprensible. Es hija de alguien que no llegó a ser condenado por crímenes de lesa humanidad porque se murió, apaciblemente, antes de la reapertura de los juicios. La muerte suele ser indulgente.
Antes Pato, luego Patio, ahora Pacto. Bullrich, claro
Bullrich perdió por konckout como candidata a presidenta pero tiene experiencia en peleas menores y ha competido en varias categorías, nunca peso-pesado. Siempre usó de sparring al Pueblo. De ese último combate, ya fuera del ring, se complotó con sus adversarios, quienes le habían propiciado una vergonzante paliza, y consiguió formar parte del staff. Quedaron atrás los insultos, señalamientos y -sin dudas- muy atrás su sombrío pasado, ese en donde nadie puede ubicarla, o sea, no se sabe desde cual esquina y qué título perseguía.
El pasado, pisoteado
En medio de la puja entre Villarruel y Bullrich está Milei. Un árbitro caricaturesco como los de Titanes en el Ring, pero sin ninguna gracia.
Javier Milei tanto como Villarruel y Bullrich, detesta la historia. No sólo la narración histórica, sino la Historia, o sea, la verdad de lo que aconteció. Este disgusto hace que fuerce el relato y ahora se propone reinventar la historia, con escasa astucia, pero demasiados recursos. En esa reinvención, se lleva puesto el segmento trágico, rescata las ideas rectoras de la dictadura en materia internacional y económica, y cobija la criminalidad política.
El desprecio por la verdad
Desde su primero discurso, ya encaramado como presidente, dijo falsedades históricas fácilmente demostrables. Recrear un pasado glorioso inexistente y ubicarlo lejos de los fenómenos sociales, populares, es su favorito. Desde decir que Argentina fue primera potencia mundial, a pretender enseñarles su propia historia a los que la vivieron y la escribieron en Europa. Desatinos aberrantes para los cuales siempre hay manos gentiles dispuestas a aplaudir.
Cómo hacerse cargo de lo que se odia y liderarlo con inteligencia
Javier Milei, jamás ocultó su odio al Estado. Reconocerle honestidad en ese capítulo no lo exime de ser un idiota. Un esotérico con algo de instrucción que, merced al buen uso de herramientas de persuasión y comunicación digital, alcanzó la cima del monte que quiere dinamitar. Si la perversión es virtud, hay que canonizarlo.
La casta de los castigados
Ante la frustración social, incentivar el odio desde las márgenes, es redituable, pero dura un instante. La indignación es un sentimiento natural, pero no la convierte en un instrumento válido para la transformación. Hoy podemos constatar que no se ha modificado ninguna de las prácticas que ofrece el privilegio del poder ocasional, sino, casi contrariamente, se han ampliado.
El rol que debe asumir el presidente, o desistir en ocupar el lugar
Una vez situado en la cúspide del poder, quien ha sido honrado por la decisión mayoritaria, debe conducir las voluntades, no promover las diferencias, estimular las rivalidades y extenuar las aversiones. Hasta aquí, más allá de las bravuconadas, las ofensas para con los diferentes, la ausencia de compasión por quienes padecen enfermedades terminales y la verborragia guaranga y lesiva contra los opositores circunstanciales (algunos fueron sus socios hace apenas unos meses) no colabora en erradicar la crisis ni en solucionar los problemas estructurales que no han podido resolver los anteriores gobiernos.
Historiadores y premios Nobel, artistas, colectivos de personas con discapacidad, dirigentes no partidarios, de acuerdo
Ciertamente inédito que una gestión haya producido una convergencia tan vasta y una coincidencia tan abrumadora, como la alcanzada por el gobierno de Milei. 68 premios Nobel, 260 historiadores, agremiaciones, sindicatos, asociaciones de la sociedad civil, se expresan para que detenga su devastación cultural y su demolición soberana.
Sin traducción posible
Quizá sólo hay dos cuestiones en la que las argentinas y los argentinos no disentimos, desde hace poco menos de cuatro décadas. Propósito idéntico desde Ushuaia a la Quiaca: ser campeones del mundo en fútbol (mayores, masculinos) y NUNCA MÁS. Esa contundente frase que no admite más que una acepción. Nunca más.
Admisión
Hoy, es necesario admitirlo, no ha sido suficiente lo mucho que se ha logrado. La epopeya de las Madres, la empresa tremenda de las Abuelas no ha sido suficiente. Apareció un mesiánico, se rodeó de personajes tremebundos, logró apoyo suficiente, y hoy, nuevamente, estremece la posibilidad de ver cómo se desmorona la República. Cómo se alienta el espíritu separatista; cómo el servilismo ilimitado soporta que se hagan ejercicios militares en las Malvinas sin decir palabra y se convoca para que ausculten si se es o no obediente a los patrones de siempre. Otra vez se arruina la industria nacional y les quitan a una gran parte de la sociedad derechos vitales.
Desaparecer, esa obsesión de algunos
Está deliberadamente expresado en el discurso del presidente Milei. Desde querer desaparecer el Banco Central, hasta desaparecer el INADI, que ya no es una posibilidad sino una concreción. Barrió con 29 años de historia. Suspender el trabajo de la Agencia Télam, 75 años de identidad comunicacional, para desaparecerla. Desaparecer el INCAA, el Fondo Nacional de las Artes. No adaptarlos, mejorarlos, eficientizarlos. Desaparecerlos. Lo dramático, lo está logrando sin demasiados obstáculos.
Pensar lo impensado, volver a las plazas
El domingo 24 de marzo no será una opción, se trata de una obligación argentina. Ganar calles y plazas. Organizaciones y familias. Restituir el sentido de Nación. Recuperar la emoción de ser parte de una Patria. Insistir en la importancia del otro, aunar el hilo, que se pensó indestructible, de la solidaridad. Es domingo. La memoria lo exige. La verdad no tiene excusas. La justicia es una aspiración humana que sólo se consigue si están todos, si están todas.