HISTORIA NACIONAL

Eva Perón: un legado Inolvidable a 72 Años de su Fallecimiento

En el 72° aniversario del fallecimiento de María Eva Duarte de Perón, EVITA, recordamos a la mujer más importante de la historia política del Siglo XX

Una semblanza resumida de Evita, la mujer que murió 72 años atrás, pero aún vive en el Pueblo de la Argentina

Infancia sus primeros años: De la Pobreza a la Estrella

Eva Duarte de Perón nació el 7 de mayo de 1919 en Los Toldos, una pequeña localidad de la provincia de Buenos Aires. Hija de Juan Duarte y de Juana Ibarguren, Eva creció en un entorno de escasos recursos económicos. La familia vivía en una modesta finca, y su infancia estuvo marcada por la privación. La temprana muerte de su padre y la dificultad económica llevaron a Eva a trabajar desde joven para ayudar a su madre y sus hermanos. 

La actriz

En su adolescencia, Eva se mudó a Buenos Aires con el sueño de convertirse en actriz. Su llegada a la capital estuvo marcada por trabajos ocasionales en el teatro y la radio, donde comenzó a forjar su nombre en el medio artístico. La joven actriz de voz clara y presencia imponente logró hacerse un lugar en el corazón del público argentino.

El encuentro con Juan Domingo Perón y el inicio de un nuevo capítulo

En 1944, Eva Duarte conoció al entonces coronel Juan Domingo Perón en un evento benéfico en favor de los sanjuaninos que habían sufrido el peor terremoto de la historia. Aquella tragedia de Enero había producido al menos 10 mil muertos. 

La atracción entre ambos fue instantánea, y en 1945, Eva y Juan Domingo se casaron en una ceremonia sencilla pero significativa. Su matrimonio no solo unió a dos personas, sino que también marcó el inicio de una transformación social en Argentina.

La influencia de Eva sobre Perón fue considerable. Ella se convirtió en un pilar fundamental en la vida política de su esposo, apoyando y promoviendo sus ideales. La relación entre ambos, a menudo descrita como una alianza estratégica y afectuosa, fue esencial para la consolidación del peronismo.

Compromiso Social y Rol como Primera Dama

Una vez establecida como primera dama, Eva Perón emprendió un vasto programa de reformas sociales. Organizó la Fundación Eva Perón en 1948, una institución que brindó asistencia a los más necesitados, promoviendo la construcción de hospitales, escuelas y viviendas para los sectores más desfavorecidos. Eva trabajó incansablemente para mejorar la vida de los pobres y los marginados, consolidándose como una de las figuras más queridas y respetadas de Argentina, promoviendo siempre la educación, la capacitación para que cada uno pudiera ganarse el pan, casi una obsesión de la joven Evita

Eva Perón también jugó un papel crucial en la obtención del derecho al voto para las mujeres en Argentina. Su esfuerzo y dedicación fueron determinantes en la sanción de la Ley 13.010 en 1947, que permitió a las mujeres participar plenamente en la vida política del país. Este logro se consolidó con la elección de Eva Perón como candidata a vicepresidenta en 1951, aunque su candidatura fue retirada a favor de la unidad del movimiento. El 31 de agosto de ese año pronuncia uno de sus discursos más encendidos y amorosos, el famoso Renunciamiento Histórico.

Reconocimiento Internacional y Legado Cultural

Durante su mandato como primera dama, Eva Perón no solo fue admirada en Argentina, sino también en Europa. En su visita a Europa en 1947 fue recibida con gran entusiasmo. En países como España, Francia e Italia, Eva fue halagada por su elegancia y su capacidad para conectar con la gente. La prensa internacional destacó su trabajo y su carisma, consolidándola como una figura de renombre mundial.

Eva Perón también dejó una marca indeleble en la cultura argentina. Su vida y obra fueron inmortalizadas en diversos medios, incluyendo el famoso musical "Evita" de Andrew Lloyd Webber. Su legado perdura en la memoria colectiva, y su impacto en la historia argentina sigue siendo objeto de estudio y admiración.

Renunciamiento Histórico y Últimos Días

Después de aquél renunciamiento, Evita se dedicó más a su salud, que se había visto deteriorada por la enfermedad que padecía.

El 26 de julio de 1952, Eva Perón falleció a los 33 años debido a un cáncer de útero. Su muerte dejó una profunda tristeza en el país, y el luto nacional reflejó el dolor de una nación que había perdido a una de sus figuras más queridas y emblemáticas. Fue el cortejo fúnebre más grande de la historia. Gran parte del Pueblo la lloró como a un familiar cercano.

El Destino de su cuerpo: Robo y Vejación

Después de su fallecimiento, el cuerpo de Eva Perón fue sometido a un destino macabro. Vejado y secuestrado del edificio de la CGT después del golpe de estado urdido por Aramburu, Lonardi y Rojas.

El cuerpo de Evita fue sacado del país bajo el nombre de "María Maggi de Magistris". Evita fue inhumada en el Cementerio Mayor de Milán en presencia de Hamilton Díaz y Sorolla, quien hizo las veces de Carlo Maggi, hermano de la fallecida. Recién en septiembre 1971 Perón recuperó el cadáver de su segunda esposa, EVITA.

Peregrinar post mortem 

No fue sino noviembre de 1974, meses después de la muerte del presidente Juan Domingo Perón,  que el cadáver de Eva fue repatriado a Argentina y enterrado en el Cementerio de la Recoleta, en un acto que permitió a los argentinos rendirle el homenaje que merecía.

Donde existe una necesidad, nace un derecho

Eva Duarte de Perón o como prefiere recordarla el Pueblo: Evita, ocupa hasta hoy un papel central en la historia argentina. Su vida, su pasión y su dedicación al servicio de los más necesitados, dejó una marca indeleble en el país. A pesar de los desafíos y las adversidades, su legado perdura como un testimonio de la capacidad de una persona para cambiar el mundo a través del compromiso y el amor hacia los demás. A 72 años de su muerte, el legado de Eva Perón cobra más vigencia hoy que nunca, mientras son avasallados derechos que ella luchó por conseguir.

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