El presidente Javier Milei asumió la presidencia Pro Tempore del Mercosur
"Todo lo que sea para romper, me encanta", dijo el presidente Javier Milei al recibir el martillo protocolar de las sesiones del bloque de su par saliente de Uruguay, Luis Lacalle Pou.
Durante su participación en la LXV Cumbre del Mercosur que se celebrar en Montevideo-Uruguay, el presidente Javier Milei volvió a expresar su defensa del modelo neoliberal, y frente a los presidentes de la región cuestionó la existencia del bloque comercial y político:
"El Mercosur no solo no nos hizo crecer sino que nos ha perjudicado".
En su breve discurso, el mandatario insistió en su propuesta para promover el libre comercio, sin restricciones, ante los jefes de Estado países miembros, y rechazó la posibilidad de irse del bloque regional.
El mandatario planteó los tres objetivos que impulsará su gestión para corregir el funcionamiento del bloque:
"Menos trabas para-arancelarias para comerciar puertas adentro, más libertad para comerciar puertas afuera y más colaboración en la persecución del narco".
Qué más expresó el presidente Javier Milei en la LXV Cumbre del Mercosur
En un intento de romper con el Mercosur, el presidente Javier Milei dijo que el mismo fue "un escollo para los argentinos" y lanzó una provocación abierta contra Lula Da Silva por el "No al ALCA" de 2005.
El mandatario pidió a los presidentes allí presentes "abrir los ojos", quitarse "las anteojeras ideológicas", admitir "que este modelo está agotado" y "buscar una nueva fórmula que nos beneficie a todos para comercializar más y mejor".
"Un mercado común regional es un instrumento al servicio del desarrollo económico de sus países integrantes. Los países lo forman libremente con el objetivo de que le rinda un rédito particular a cada uno. No es una imposición inalterable, es un instrumento libremente elegido", insistió durante la ceremonia de asunción a la presidencia del bloque.
En la misma línea, planteó que debe ser sometido para ver si funciona y si rinde los resultados prometidos, y remarcó que "no puede tener reglas y determinaciones estáticas". "Si sus normas son perniciosas tiene que ser posible cambiarlas, en función de lo que necesitan los usuarios del instrumento, los países firmantes. Es decir, este instrumento debe ser blando y maleable; de lo contrario su propia rigidez lo termina quebrando", reiteró.
También, destacó que su presidencia al frente del Mercosur estará caracterizada por recuperar el espíritu crítico del bloque que, según expuso, "tal como funciona hoy, trae más problemas que soluciones".
Pese a sus críticas, echó por tierra las chances de romper con el bloque, aunque deslizó la posibilidad de "disolución" de mantenerse el funcionamiento actual del bloque. "Tenemos dos caminos: o aceptamos que el Mercosur no funciona y lo disolvemos, lo cual no es la voluntad del gobierno argentino, o lo adaptamos para que sea funcional a las necesidades actuales de sus integrantes", remarcó.
"Necesitamos capitalizarnos, de manera urgente; necesitamos importar y exportar, de modo urgente a Paraguay, a Brasil, a Uruguay sí, pero también con el resto de la región y con todo el mundo. El Mercosur representa únicamente el 1,6% del comercio mundial. No podemos darle la espalda al resto del mundo, no nos podemos dar ese lujo", subrayó.
Otro de los puntos sugeridos por el libertario fue la conformación de una agencia coordinada que aborde la seguridad en la Triple Frontera y combata el narcoterrorismo. "Será ágil, moderna en métodos y recursos y no burocrática. Esta agencia tendrá investigadores de todos los países que estudiarán las bandas que intentan dominar nuestros territorios", detalló.