La Casta no tiene miedo, la Casta tiene acuerdos
Nota de opinión de Martín Tula sobre los acuerdos políticos del Presidente Javier Milei
"Las opiniones vertidas en esta sección son de carácter personal y no necesariamente coinciden con las decisiones editoriales de Diario PORTADA."
Fue un 23 de septiembre de 2023 cuando el liberalismo, liderado por el presidente Javier Milei, entonaba el famoso "La Casta Tiene Miedo" en un acto organizado por uno de los gordos sindicales, el catamarqueño que alguna vez dijo: "tenemos que dejar de robar dos años y esto mejora" (Argentina debe ser el único país donde alguien dice que tenemos que dejar de robar y pasa como si nada).
Barrionuevo es uno de los integrantes de la casta sindical de Argentina. O sea, ¿hago un acto en contra de la casta con apoyo de cierto sector de la misma? Ruido es poco.
El presidente, que tanto criticó "la rosca política", no solo la lleva adelante en su gestión de gobierno, sino que, en algunos casos, estos acuerdos son con lo más rancio del poder judicial y la política. Lo vemos en los aumentos de sueldo en los cargos de Karina Milei y Adornis, quienes además pasaron a ocupar cargos de Ministro para así poder justificar estos incrementos. A esto se le suma el reingreso al cargo del Secretario de Prensa de Serenellini (quien había sido dado de baja hace unas semanas). Esto es solo una parte, porque también tenemos acuerdos en las cámaras y en lo judicial.
La Casta Judicial
Dijo Cúneo Libarona cuando se lo consultó sobre el Juez Lijo:
"Es una persona idónea y las causas en su contra se cayeron".
Claramente, Cúneo no faltó a la verdad, pero sin ningún tipo de duda omitió dos puntos fundamentales en este diagnóstico. El juez no es ni probó ni ético.
Lijo es uno de los responsables de que las causas de la ex presidenta Fernández de Kirchner no avancen; también tuvo en su contra, junto a su hermano, una causa por enriquecimiento ilícito (causa que fue cerrada) que llevó adelante la investigación un "amigo" como Ercolini y la defensa estuvo a cargo de Cúneo Libarona.
Un juez que mueve influencia y cuyo hermano "Freddy" es un reconocido lobista judicial, además de ser defendido en su momento por el actual ministro de justicia en la causa que tuvieron en su contra, demuestra que lo probó y ético está muy lejos del día a día de estos exponentes judiciales.
Estos "acuerdos", donde la justicia debe ser imparcial y justa, parecen que no solo se ausentan del poder judicial, sino también del Ministerio de Capital Humano. Resulta irónico que el capital humano de este gobierno, en gran parte de sus ministerios, tenga cargos ocupados por integrantes del gobierno anterior.
Quien debe auditar la gestión anterior es Leila Gianni, abogada de 39 años militante del Frente de Todos (la filiación partidaria no debería ser un dato de relevancia, pero en un país como el nuestro, casi siempre termina siendo importante) y funcionaria de la Jefatura de Gabinete del gobierno anterior. Sus primeros pasos fueron por ANSES en 2008 (ANSES en dos décadas se volvió como las inferiores de los gobiernos Kirchneristas, antes de ascender en el Estado tenés que pasar por ahí sí o sí).
Gianni en la actualidad realiza una investigación sobre el sobreprecio de medicamentos en el gobierno de Alberto Fernández y la causa está a cargo del Juez Ercolini. Causa que seguramente quede durmiendo en un cajón; creo que no tengo que explicarles el por qué.
Ojo, está mal pero no tan mal
Cuando Milei gritaba "Son todos ratas y parásitos que viven del estado", uno en ese momento recordaba lo que dice el meme que tiene como protagonista a Guido Kaczka: "Ojo, está mal, pero no tan mal".
Sentía que al fin alguien iba a poner blanco sobre negro el tema de las cajas de la política, el manejo desmedido de fondos de las dos Cámaras, etc. Pero nada de eso sucedió. Fuimos engañados nuevamente por otro gobierno.
Fuimos espectadores del papelón del Senado, donde en un tiempo récord de menos de un minuto, los representantes de las 23 provincias que componen el territorio nacional, habiendo dado quórum y no emitiendo ningún tipo de queja, decidieron que la nuestra no se toca (la de ellos, porque la de usted querido lector y la mía sigue cayendo con la recesión a la que estamos sometidos desde hace más de 10 años) y se aumentaron más de un 130% en sus sueldos y dietas.
Luego aparecieron los indignados de siempre de La Libertad Avanza y del PRO. Los primeros diciendo que fueron los únicos 7 que no votaron y luego se sumó el PRO diciendo ojo nosotros tampoco votamos ni firmamos el proyecto.
Pero como pasa en todo relato en la Argentina, al día siguiente se cae; la Vicepresidente mediante un posteo en X dejó en claro que era una decisión de los senadores y que la misma se había planificado un día antes a este rotundo "todos sabían, no se hagan los distraídos" que dejó entre líneas. Se suma que el senador por San Juan de LLA firmó el proyecto.
El mismo que unos meses antes celebró el derogar un aumento del 14% que se tiró para atrás en diputados. Pero la libertad de decisiones no termina ahí en el oficialismo, el presidente del bloque Atauche dijo que el presidente Javier Milei estaba al tanto de estos aumentos.
Mientras tanto, el PRO se golpeaba el pecho diciendo no solo no votamos nosotros, tampoco firmamos el proyecto, pero a la primera consulta al Senador Luis Juez de por qué no pidió la palabra para expresar su voto negativo, además de transpirar más que un testigo falso y no poder sostener ese pecho lleno de patriotismo y empatía con la sociedad respondía que lo sorprendió, que no tuvo reacción y más justificativos carentes de sentido a la hora de justificar un desastre.
Hablar de Lousteau en esta nota carece de sentido, el senador que se indigna por lo que cobra un jubilado pero se compara con un trabajador bancario no se le puede agregar más nada para demostrar su falta de realidad y compromiso con el votante.
Casi 5 meses de gestión y lo que vemos día a día es que LA CASTA NO TIENE MIEDO, LA CASTA TIENE ACUERDOS.