Cuando la limosna es grande, profanos y santos deben leer con detenimiento

El Gobierno nacional entregó un borrador definitivo sobre la Ley Ómnibus. Según explican en la introducción, se trata de una consideración de los distintos actores de la sociedad que han participado activamente en los debates que se dieron, no sólo en el Plenario, sino en forma espontánea, pública y a través de las redes.

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Patrimonio nacional.

Las negociaciones que vienen realizando desde el Poder Ejecutivo, han sido arduas y en demasiados casos, de espalda a la opinión pública, tema que alienta la legítima desconfianza de varios sectores. La reuniones mantenidas en el hotel Savoy, a escasos metros del Congreso de la Nación, despertaron inevitables suspicacias y se habló de negociación de "favores", una alarme a la que deberemos estar atentos.

Hasta el santo desconfía.

De los 664 artículos, hay cambios significativos sobre 132 de ellos. Y la pretensión de Milei y su equipo es que se pueda dar dictamen urgente para su tratamiento en comisiones y pronta aprobación.

Hay algunos de los artículos, cuya urgencia era inexplicable, que pasarán para ser tratados desde marzo, en sesiones ordinarias de ambas cámaras.

Parar al Paro general.

El volumen de adhesión previsto para el miércoles 24 es histórico, y no es requisito ser muy suspicaz para asociar esto con la retracción de medidas que afectan a grandes sectores de la comunidad.

La cultura no se improvisa.

Lo atinente al Instituto Nacional de Cine (INCAA), al INAMU, Instituto Nacional de la Música y al Fondo Nacional de las Artes, sirve para evidenciar que, o la improvisación es inconmensurable, o el fanatismo ideológico es el motor de este nuevo gobierno. Lo que queda como resultado de la modificación en este articulado es razonable, extraño que ese no haya sido el original.

Movilidad jubilatoria.

Un tema neurálgico del proyecto refiere a este tema. Cómo se actualizaría los haberes de jubiladas, jubilados, pensionadas, pensionados. Incorporaron la actualización por inflación, según lo que dicte el INDEC, pero un detalle no menor, desde abril. O sea, la devaluación brutal y esta postergación en la actualización, es una herramienta vital para el propósito obsesivo de la reducción del gasto público.

Banco Nación, adentro.

Aunque este cambio merecería un análisis propio, el cambio es sustantivo, pero con reservas. Se decide que le abrirán las puertas al sector privado pero el Estado Nacional deberá mantener la mayoría accionaria y por ende, el control. Suena extraño para los que creyeron inocentemente en los argumentos falaces que habían dado para privatizar esta entidad financiera, que además de ser superavitaria, es una herramienta esencial para el desempeño de empresas y personas que contribuyen a la economía de la Argentina. También requiere estar muy atentos, sobre quienes serán los actores financieros que ingresen.

ARSAT, Elon Musk y la soberanía concreta.

Otro de los cambios ofrecidos o logrados por diputados de la oposición es la propiedad de esta Empresa Nacional, que ubica a la Argentina entre los 8 países (sobre más de 200) que cuenta con satélites propios, desarrollados por Inteligencia argentina. Aunque no se privatizará en su totalidad, también otorga la posibilidad de participación accionaria de capitales privados. La letra chica no impone restricciones para extranjeros, por lo que es natural deducir que el magnate sudafricano dueño de Tesla, podría ser uno de los ingresantes.

Visiones y lecturas.

Entre las muchas opiniones, observamos la advertencia de la Diputada Victoria Tolosa Paz, quien ocupó hasta diciembre la cartera de Desarrollo Social, en la Nación. 

Sigue siendo un proyecto que concentra, extranjeriza y primariza nuestra economía. Hay que rever el capítulo de las retenciones, por ejemplo, el 15% para la cebada, la malta y la cerveza, que en la provincia de Buenos Aires nos deja sin margen de maniobra, en una Argentina que venía con un descuento en las retenciones, que activó Sergio Massa para brindar condiciones favorables en la cadena de valor de origen.

Agregó Tolosa Paz que la posición de su bloque va a ser la misma que vienen defendiendo, porque la que está enfrente, sigue siendo una idea de una Argentina que no aporta valor y desindustrializa.

Quedan, dentro de las 532 artículos de este proyecto de Ley, demasiado riesgo institucional como para que la pretensión del Poder Ejecutivo sea tan expedita y veloz. Los números en el Congreso aún no le son suficientes, y nada indica que se pueda desactivar la convulsión gestada desde la publicación del DNU y la brutal devaluación que sólo ha beneficiado al sector más concentrado de las finanzas y la economía.

Difícil para el paro.

Las centrales obreras, las organizaciones sociales, los partidos políticos y los ciudadanos de a pie, quienes han visto, según el caso, vulnerada su confianza (muchos de quienes optaron por Milei en el balotaje, creyendo que llegaba una gestión para evitar privilegios y enderezar la economía)otros ven amenazados sus futuros, despojados de derechos y la gran mayoría, afectados seriamente en su cotidianeidad, difícilmente abandonen sus manifestaciones y den crédito inocente a este cúmulo de arrepentimientos forzados. El 24, tendremos una primera conclusión.