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Preocupación por el traslado de la Agencia de Discapacidad al Ministerio de Salud

El traslado significaría que la discapacidad se enfoque en el modelo médico de "rehabilitar" perpetuando la estigmatización, y eliminando el modelo social que promueve la igualdad de oportunidades y la plena participación de las personas con discapacidad en todos los aspectos de la vida.

La comunidad de personas con discapacidad y las organizaciones que integran ALAPA, la Alianza Argentina de Pacientes, desean expresar su profunda preocupación ante el reciente anuncio del traspaso de la Agencia Nacional de Discapacidad -ANDIS- a la órbita del Ministerio de Salud.

La ANDIS ha desempeñado un papel crucial en la implementación y gestión de políticas públicas orientadas a garantizar los derechos y la inclusión de las personas con discapacidad en nuestra sociedad.

La autonomía de este organismo es fundamental para focalizar y abordar de manera específica las necesidades y desafíos de este colectivo, asegurando un enfoque especializado y comprometido.

Las inquietudes y pérdidas si se concreta el traslado de ANDIS

  • Pérdida de Autonomía: temen que la integración de la ANDIS al Ministerio de Salud pueda diluir su enfoque especializado y su capacidad de acción independiente, vitales para la promoción y defensa de los derechos de las personas con discapacidad.

  • Desviación de Recursos: existe el riesgo de que los recursos destinados específicamente a programas y servicios para personas con discapacidad sean redirigidos a otras áreas del Ministerio de Salud, comprometiendo la atención y el apoyo especializado que se requiere.

  • Burocracia y Eficiencia: la absorción de la ANDIS por una estructura ministerial más amplia podría incrementar la burocracia y ralentizar los procesos de atención y respuesta a las necesidades urgentes de las personas con discapacidad.

  • Enfoque Integral y Multidisciplinario: la discapacidad no solo es un tema de salud, sino que abarca aspectos sociales, educativos, laborales y de derechos humanos. Temen que un enfoque predominantemente sanitario no capture la complejidad y diversidad de las necesidades de las personas con discapacidad.

  • Decisiones Inconsultas: una vez más, una nueva gestión estatal toma decisiones de manera inconsulta, afectando directamente a las personas con discapacidad sin tener en cuenta sus voces y necesidades. Esta práctica es contraria al principio de "Nada sobre nosotros sin nosotros", que debe ser un pilar central en cualquier decisión que afecte a nuestra comunidad.

Las personas con discapacidad tienen derechos

Toda la comunidad de personas con discapacidad entienden que volver a la órbita de Salud es una regresión y contradice el compromiso asumido por la Argentina en 2008 con la aprobación de la Convención Internacional de Derechos de las Personas con Discapacidad y el enfoque de Derechos Humanos.

La Convención subraya la importancia de la autonomía, la no discriminación, la participación plena y efectiva, y la igualdad de oportunidades para todas las personas con discapacidad.

Porque no se puede volver al enfoque médico de "rehabilitar"

El modelo médico de la discapacidad, enfocado en «rehabilitar» a la persona mediante intervenciones médicas, genera problemas en comparación con el modelo social, que ve la discapacidad como resultado de barreras sociales y ambientales.

El enfoque rehabilitador perpetúa la estigmatización y no aborda estas barreras, mientras que el modelo social promueve su eliminación y la igualdad de oportunidades.

Esta perspectiva rehabilitadora no se centra en la inclusión social, esperando que el individuo se adapte al entorno en lugar de hacerlo accesible para todos.

Además, tiene un alcance limitado en la promoción de los derechos humanos, no garantizando el acceso a la educación, empleo y participación social.

Por el contrario, el modelo social aboga por eliminar barreras y promover la igualdad de oportunidades.

Un llamado a la participación e inclusión en la toma de decisiones

Solicitan a las autoridades competentes que cualquier cambio organizacional no perjudique la atención, los servicios y los derechos de las personas con discapacidad.

Para ello, proponen la realización de consultas y diálogos con representantes de la comunidad de personas con discapacidad para explorar alternativas que fortalezcan, en lugar de debilitar, la ANDIS.

Y reiteran su compromiso de trabajar para garantizar que las personas con discapacidad continúen recibiendo el apoyo y la atención especializada que merecen.



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