Oscar "Ringo" Bonavena y sus geniales frases que ya son parte de nuestra argentinidad

Bonavena, dueño de un particular ingenio

Si algo caracterizó al genial Oscar Ringo Bonavena fueron sus ocurrencias y frases. Su creatividad era tan grande como su humanidad y sus célebres dichos y respuestas quedaron en el inconsciente colectivo argentino.

A veces reflexivo y sincero; simpático y despectivo. Otras humillante y, cuando se lo proponía, desgarradoramente profundo.

Al igual que sus piñas, cuando hablaba, no pasaba desapercibido.

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Las mejores frases de Oscar Ringo Bonavena

En el mes aniversario de su desaparición te dejamos una selección de las mejores frases de El Ringo:

1. "La experiencia es un peine que te lo dan cuando te quedas pelado".
2. "Dios me hizo boxeador. Bueno, yo digo Dios como puedo decir mi mamá. A Dios no lo conozco, a mi vieja sí y es lo más grande que hay".
3. "De tanto repetir, casi me caso con la maestra" (abandonó en sexto grado de la primaria).
4. "¿Cuántos hermanos somos? Ocho vivos y yo, que soy el único que trabaja".
5. "La calle lo aviva a uno. Nadie es malo de chico, pero no se la puedo vender cambiada diciéndole que era un santo, que hacía bien los deberes, que no fumaba a escondidas bajo el puente y que iba a misa los domingos. Todos me lo cantaban en el barrio: vas a ser boxeador, y a fuerza de repetírmelo, me lo creí".
6. "No me gustan las mujeres modernas. La casa o la vida".
7. "Aunque no lo parezca, yo soy un tipo muy consciente".
8. "Todas las mañanas, a eso de las siete, se repite esta misma escena ante mis ojos llenos de sueño: la pelada del profesor López Aguirre me anuncia que debo levantarme. He decidido perdonarlo porque ya me llama campeón".
9. "Mejor perder a lo macho que ganar a lo cobarde".
10. ¿Cómo será eso de tener un conflicto con uno mismo?".
11. "Al campeón mundial siempre se le descubren las cosas buenas; las malas quedan para los perdedores. ¿Por qué no puedo ser campeón mundial? Claro, me van a decir que porque soy un desastre. Bueno: déjenme probar".
12. "Uno tiene un representante o mánager, un masajista que le ablanda a uno el cuerpo, recibe consejos hasta del promotor, alguno se lleva más dinero que el propio boxeador; pero lo cierto es que cuando suena la campana, te sacan el banquito y uno se queda solo".
    
13. "Hay que andar en la mala para saber quién es la gente. Claro, me doy cuenta que es difícil andar con un perdedor".
14. "¿Que podía haber terminado de pie con Alí? Puede ser, pero ése era mi verdadero sueño y, por lógica, los sueños también a veces terminan mal. Fue mi pelea, aunque haya sido derrotado".
15. "En este país hay tantos chantas que ya no queda plástico... lo gastaron todo haciendo carnets".
16. "Quiero decirles a todos que perdí porque quería ganar (después de caer con Alí)".
17. "Cada rival es un peligro latente. Cada combate es una nueva embestida que la vida nos depara. Cada triunfo es un paso más hacia lo que uno se ha propuesto. En definitiva, el boxeo y los boxeadores no son nada fáciles".
18. "Uno siempre tiene algo de pibe. Yo veo a los chiquilines pateando una pelota o remontando un barrilete, y se me van las manos. Y eso es lo mejor".
19. "Al fin y al cabo, ¿qué es la guita? La guita no tiene dueño y pasa de mano en mano. Para mí es un asunto fundamental hasta que se firma el contrato. Después se acaba el tema del dinero y lo único que me importa es pelear de tal manera que nunca pueda sentir vergüenza de mí mismo".
20. "La gente no comprende que mi paso por la vida tiene un guión. Es como cualquier película: está el malo y el bueno. Yo, por características naturales, hago siempre de malo, aparentemente. Eso atrae, irrita pero atrae. Por ese motivo lo sigo haciendo".

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