El encanto revelado en 1880: Mendoza a través de la cámara de Christiano Junior

Orlando Pelichotti

Pionero de la fotografía de Latinoamérica. Protagonista de Mendoza a través de su mirada y de su cámara: el portugués Christiano Junior

Nuestra historia provincial tiene como protagonista a uno de los pioneros de la Fotografía Latinoamericana: José Christiano de Freitas Henriques Junior, aunque la historia lo recuerda como Christiano Junior.

Apenas diez años después del devastador terremoto

A fin de octubre de 1871, y tras un exitoso paso por la Exposición Nacional de Córdoba, fue invitado a conocer nuestra provincia por su amigo Leonardo González Garaño. Arribó junto a Jacinta Fraga, su esposa, y a sus dos hijos Federico Augusto y José Virginio, que por esos años ayudaban en la logística del traslado de equipos, captura y también del proceso químico final.

Regresarán a Buenos Aires con una visión distinta de lo que era Argentina, donde estaban radicados desde 1867. Ya gozaba de prestigio en el arte del registro fotográfico retratando a figuras de la alta sociedad ,en su estudio céntrico. Las imágenes de Lucio V. Mansilla, Domingo Faustino Sarmiento, Adolfo Alsina fueron eternizadas por Christiano Junior.

Además supo perpetuar paisajes, costumbres y personajes anónimos de la época de las ciudades, plasmados en álbumes especiales con tapas de cuero y encuadernados, siempre basado en la técnica fotográfica del colodión húmedo de la albúmina y del vidrio que le permitieron obtener impresiones o imágenes de grano tan fino, que al ampliarlas su definición era increíble.

Viajero infatigable de acento inconfundible

Recorrió y vivió en varios países de Europa, de África y de América del Sur. Había nacido en 1832 en las Islas Azores, territorio que pertenece actualmente a la República de Portugal. Aprendió el castellano en Uruguay, y nunca perdió su característico acento portugués al hablar.

Se destacaba por componer armónicamente sus fotografías, tanto en las que producía en el estudio, como en los retratos que ocurrían en momentos cotidianos de las ciudades y para distribuir a las personas de manera equilibrada a la hora del encuadre. También se autorretrató en varias ocasiones, algunas de esas selfies del Siglo XIX  se conservan en el Archivo General de Mendoza.

Fotografías en donde puede verse la antigua Plaza Independencia, y entre varios transeúntes, aparece él con su mirada característica, escondida detrás su espesa barba.

El mapa de la Argentina del 1880 bajo la lúcida mirada de Christiano Junior

En 1878 vendió su estudio en Buenos Aires y comenzó un incansable viaje por esa Argentina lejana que le abrió las puertas desde las provincias de Santa Fé, Córdoba, después en 1880 regresó a Mendoza, hasta octubre de 1881, y continuó por San Juan, San Luis, Catamarca, después Tucumán, Salta y finalmente Jujuy.

Sus días en Mendoza

Poco más de un año vivió con toda su familia en nuestra provincia, entre 1880 y 1881, lo que le permitió interactuar con la alta sociedad, viajar por la alta montaña; conocer en el Norte las lagunas de Guanacache y en el Sur: San Rafael.

Durante su estadía en nuestra provincia, vivió con su familia en la calle San Nicolás y calle de la Aduana (actual avenida San Martín y Necochea) y su estudio comercial lo estableció en San Nicolás esquina de La Paz, casa de don José María Videla, según consta en publicaciones del diario "El Constitucional" en la edición de 1 de mayo de 1880.

Recuerdos indelebles

Algunos de sus trabajos se pueden ver en el desaparecido diario "El Ferrocarril" y en el diario "El Constitucional".

Una de las cosas que le llamó la curiosidad era el viento Zonda porque le recordaba a su infancia, solía manifestar en las reuniones de la alta sociedad a las que era invitado con mucha frecuencia y en sus memorias también destacaba las costumbres del campo, como las que realizaban en invierno, específicamente los carneos.

Una visión dolorosa

En febrero de ese año, su nieta -hija de su primogénito José Virginio- falleció en un accidente doméstico, lo que obligó a regresar de San Rafael. Su obra desde aquel trágico hecho, reflejó una mirada distinta, donde se involucraron tomas con espacios más abiertos, con más personas y hasta una complicidad indiscutida con quienes saldrían retratados.

Últimos días y su obra, hoy

Todo ese histórico registro fotográfico por nuestra geografía del 1880 quedó plasmado en tres álbumes, los cuales uno se conserva en parte en el Archivo General de la Provincia en San Juan, otro en el Archivo General de la Nación, y el principal es el que le regalara a su amigo médico Leonardo González Garaño, que lo salvó de una neumonía, y lo cual fue declarado muerto erróneamente en el Hospital San Antonio, hasta que el médico lo tratara personalmente. Afortunadamente lo atesoraron sus herederos, hasta que fuera en donación y custodia al Archivo General de Mendoza, donde un equipo técnico lo conserva.

"El resultado de la extensa visita por nuestra geografía del fotógrafo Christiano Junior, permite comprender cómo era esa sociedad y visibilizar algunos patrimonios que ya no existen, apenas quedan pocos testimonios gráficos originales", acotan para Portada.com.ar, Alicia Guevara y Gustavo López, técnicos en documentación del Archivo General de Mendoza, mientras destacan su presencia en la página a modo de autorretrato en este libro que se conserva en la cámara espacial, y se puede vislumbrar esa riqueza histórica del siglo XIX, capturada con una sensibilidad única.

Del océano a la cordillera, del Atlántico a Los Andes

El viaje continuó por varios años en el norte de Argentina, hasta llegó a su fin en Asunción del Paraguay, donde la muerte lo sorprendió el 19 de noviembre, dejando inconcluso su legado histórico de "Vistas y costumbres de la República Argentina, desde el Atlántico a Los Andes", al año siguiente sus familiares trasladaron sus restos mortales hasta Buenos Aires y lo sepultaron en el Cementerio de Olivos.