Encuentran un cóndor muerto en Potrerillos: tenía 14 perdigones de plomo en su cuerpo
El cadáver fue hallado este sábado en la Quebrada de los Gateados por un hombre que practicaba trekking en la zona. La necropsia reveló que el cóndor falleció debido a una grave intoxicación por plomo, lo que le provocó una muerte lenta y dolorosa.
Este sábado se registró un lamentable descubrimiento en Potrerillos, donde fue encontrado el cuerpo de un cóndor andino sin vida en la Quebrada de los Gateados.
El ave, un ejemplar macho adulto de más de 20 años, fue avistada por un hombre que recorría la zona haciendo trekking. El testigo notificó de inmediato a la Fundación Cullunche, una entidad dedicada a la protección del medioambiente y la fauna autóctona.
Posteriormente, el cóndor fue trasladado para someterlo a un examen forense y determinar las causas de su deceso.
Al realizar la necropsia, los especialistas hicieron un descubrimiento preocupante: el cuerpo del cóndor contenía 14 perdigones de plomo, resultado de disparos con armas de fuego.
La muerte del ave no fue instantánea, sino que se debió a una prolongada intoxicación por plomo, lo que provocó un deterioro progresivo que culminó en una dolorosa agonía. Este caso vuelve a poner de relieve el impacto devastador de la caza ilegal en especies protegidas por la ley.
El plomo de los perdigones, comúnmente usados en cartuchos de calibre 12, puede oscilar entre 24 y 36 gramos, una cantidad suficiente para envenenar al ave y causar su muerte de forma lenta.
Además, se subrayó que el cóndor es una especie carroñera, lo que significa que se alimenta de animales muertos sin haber participado en su caza. No existe justificación alguna para dispararle, ya que cumple un rol vital en el ecosistema al eliminar restos orgánicos y facilitar su reciclaje.
Los descomponedores aprovechan los restos dejados por los carroñeros, contribuyendo al equilibrio ambiental.