Cacho Garay libre y solidario: sin ser protagonista, actuó para proteger a una accidentada

La voz del humorista, para todos los mendocinos, es inconfundible.

La actitud de ser humano, para muchos que lo conocen, también.

Cacho Garay es así, comprometido y solidario como quedó registrado en el vídeo, aunque apenas se detecta su sombra.

Promediando la mañana del miércoles 11 de junio, un accidente se registró en la intersección de Agustín Álvarez y Boulogne Sur Mer, a metros del Parque General San Martín, en Ciudad. Un taxi y una moto colisionaron. La conductora de la moto, una chica, cayó al suelo y quedó inmóvil. A los pocos segundos del hecho pasa por el lugar Cacho Garay junto a un amigo:

- Le hice estacionar el Renault 12 a mi amigo, de tapón con las balizas, para cubrir a la chica tirada en el piso. Y me puse atrás a desviar o guiar el tránsito por el costado Oeste hacia el Sur.

- (Cuando me fui del lugar), llegó la policía pero la ambulancia no.

Así, con esa economía de palabras que lo caracteriza, fue el mensaje que le enviara Cacho a este periodista, para luego acompañar el breve texto con un vídeo.

La situación de Cacho, hoy

Hoy Cacho Garay camina en libertad restringida, sin sentencia firme. El proceso judicial sigue su curso, con una lentitud insoportable y algunos desvíos inexplicables.

Pero el tipo cumple, como debe ser. Desde el primer día. Garay permaneció detenido casi dos años. Su situación procesal se prolongó entre dilaciones, decisiones controvertidas, algunos episodios increíbles y una investigación que, según su defensa, posee serias falencias.

Qué hacía Cacho en la calle

Hace poco, la jueza Natacha Cabeza, firmó la resolución que permite su excarcelación, apoyándose en dos ejes: el estado de salud del imputado y el cambio de domicilio de la denunciante. Pero Cacho debe presentarse todos los meses ante la Justicia a firmar, dar fe.

¿Y en los escenarios?

Días atrás retornó al lugar que mejor domina: el escenario. En un espacio para 500 personas, su público ávido del reencuentro, colmó las localidades y nuevamente la risa se apropió de la atmósfera. Su traumática experiencia no fue óbice para que Cacho Garay volviera a mostrar por qué ha sido ganador de tantos premios y por qué goza del reconocimiento afectivo de tanto público. El gesto impertérrito, el relato costumbrista, el silencio y la insinuación, funcionan como combustible para fabricar carcajadas y miles de aplausos.

Qué pasó con el accidente

Según pudo averiguar Diario PORTADA ante las autoridades de Seguridad, al cierre de esta nota, la joven motociclista se encontraba con buen estado de salud y con el shock propio de estas situaciones. 

Cacho sabe de dolor. Del corporal y del otro: el profundo. Ese que no sana con un paracetamol.

Tanto sabe que no pudo evitar dar fe, además, de su don de humanidad.