Marchan por Alejo: cuando la justicia tarda, la esperanza camina

Alejo Montenegro tenía solo 17 años. Amaba el fútbol, soñaba con llegar lejos, y una madrugada de junio su vida se detuvo abruptamente en la calle Los Italianos, en Guaymallén. Fue atropellado por un conductor alcoholizado que huyó del lugar. Hoy, su familia -con una entereza que conmueve- vuelve a pedir justicia, pero también conciencia. Porque si el Estado exigiera mejores servicios y controles, quizás Alejo seguiría entre nosotros.

Adrián Characán
Adrián Characán

Su familia convoca a una nueva marcha pacífica en Mendoza, exigiendo justicia por Alejo Montenegro y por todas las víctimas viales que quedaron en el olvido. Una noche que no se olvida.

Fue en junio de este año, en el callejón Los Italianos, en el distrito Kilómetro 8 de Guaymallén. Alejo y un grupo de amigos habían salido a pedir un Uber, pero al no tener señal, caminaron unos metros hacia una zona donde el celular funcionara. En ese breve trayecto, una camioneta Ford Ranger los embistió.

Marchan por Alejo: cuando la justicia tarda, la esperanza camina

Alejo sufrió heridas gravísimas y fue trasladado al Hospital Central, donde poco después se confirmó su muerte cerebral.

El conductor, Joaquín Pastorelli, de 20 años, dio positivo en el test de alcoholemia -1,30 gramos por litro de sangre-, se fugó tras el impacto y se entregó horas después acompañado por su padre. Hoy, permanece en libertad mientras la causa avanza lentamente en la justicia. 

En paralelo, la familia de Pastorelli -el joven que conducía aquella madrugada- ha llegado incluso a quitar los carteles de pedido de justicia que, con enorme esfuerzo y dolor, la familia de Alejo Montenegro va colocando por distintos rincones de la ciudad.

Como si arrancando esos papeles pudieran arrancar también la culpa o la responsabilidad de Joaquín.

Como si creyendo que borrar una foto, un nombre o un reclamo pudiera volver inocente una conducta soberbia, lesiva, dañina, egoísta, inconsciente e indolente.

Pero no se puede tapar el sol con la mano.

Y quitando un cartel no se hace inocente a una persona.

Lo más triste de todo es que tampoco se le devuelve la vida a Alejo.

Montenegro: una familia que no se rinde

Desde el primer momento, los padres y hermanas de Alejo eligieron la paz, la dignidad y la constancia. No quieren venganza, quieren justicia. No buscan odio, buscan conciencia.

Marchan por Alejo: cuando la justicia tarda, la esperanza camina

Han marchado, han hablado con medios, han tocado puertas y, sobre todo, han sostenido el nombre de Alejo en alto. Ese nombre que representa no solo a un hijo y a un hermano, sino a cientos de jóvenes que salen de sus casas sin saber si volverán, porque la irresponsabilidad ajena o la inacción del Estado los espera en alguna esquina.

"Si el Estado exigiera mejores servicios a las empresas que facturan millones, si hubiera señal, si existiera transporte público en esas zonas, si los controles fueran reales, quizás Alejo hoy estaría entre nosotros", piensan sus familiares.

Una historia que se repite

El caso de Alejo no es aislado. El viernes 31 de octubre, en José C. Paz, Buenos Aires, en Ruta 197 y calle Mendoza, un joven de 18 años, Michael Carvallo, al volante de una Amarok y con alcohol de 3,01 mg en sangre, esto supera el límite bonaerense donde rige la Ley de Alcohol Cero

Marchan por Alejo: cuando la justicia tarda, la esperanza camina

Atropelló a una familia en un Renault 12, matando al padre y a la madre, dejando a tres hijos heridos, huérfanos y a la mayor internada en el Garrahan.

El velocímetro de la camioneta quedó clavado en 140 km/h.

Marchan por Alejo: cuando la justicia tarda, la esperanza camina

Así, las tragedias se repiten como un eco: vidas truncadas, familias destruidas, expedientes que se empolvan.

Por qué marchan

Marchan porque no quieren más Alejos.

Porque las leyes deben cambiar.

Porque las condenas no pueden seguir siendo simbólicas.

Porque cada historia que se archiva deja abierta la puerta para la próxima víctima.

Y porque Alejo no puede hablar, pero ellos sí.

Por eso convocan a la comunidad, a los amigos, compañeros, vecinos, docentes y familiares de víctimas viales a unirse en una sola voz.

Convocatoria

  • Marcha Pacífica - Justicia por Alejo Montenegro.
  • Jueves 13 de noviembre - 12:30 hs.
  • Desde la Plaza Fray Luis Beltrán (entre calles Alberdi y Mitre, Mendoza).

Marchan por Alejo: cuando la justicia tarda, la esperanza camina

Convocan a toda la comunidad a acompañar, a marchar con respeto, con amor, y con la fuerza que solo el recuerdo puede dar.

Para que las leyes cambien.

Para que ninguna familia vuelva a pasar por lo que ellos están viviendo.

Para que el nombre de Alejo Montenegro siga encendiendo la llama de la justicia y de la empatía.

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