El combustible que requiere la Ley Ómnibus en materia de hidrocarburos lo aportarán los gobernadores
En el marco de la discusión por la Ley Ómnibus, donde el Poder Ejecutivo Nacional intenta avanzar, los gobernadores de las provincias productoras de hidrocarburos se abroquelan para negociar los cambios en esa materia. No aceptarán que la Nación arrase con los derechos de los Estados Federales.
Eufóricos petroleros
Lejos de la euforia que exhibió la Cámara de Exploración y Producción de Hidrocarburos (CEPH) que nuclea a las empresas petroleras más importantes del país, la liga de los gobernadores de las provincias productoras (OFEPHI) consensuaron un documento para modificar los artículos de la Ley Ómnibus atinentes a la exploración, extracción, refinamiento y venta de petróleo.
Las provincias, unidas por la autonomía
La reunión de la Junta de Gobierno de la Organización Federal de los Estados Productores de Hidrocarburos (OFEPHI) fijó postura ante el Gobierno Nacional, y exponen con claridad que no admitirán cambios que afecten la potestad federal de los recursos.
Documentos, por favor
El texto consensuado por los mandatarios fue revisado por el secretario de Energía de la Nación, Eduardo Chirillo y será remitido con el propósito que admitan los cambios en los artículos de la ley.
Varios aspectos son los que deberían modificarse. Además de que la Nación no se arrogue facultades sobre el arbitrio de los recursos de las provincias, ponen freno en asuntos muy sensibles y diferentes según cada región como el tema de los requisitos del cuidado del ambiente, algo que en el proyecto se soslaya.
Freno a las aspiraciones unitarias
La heterogénea composición política de esta liga permitió que el documento se centre en cuestiones técnicas, económicas e institucionales, sin detenerse en aspectos de mayor sensibilidad política.
Las diferencias que cada Provincia ostenta en participación de la producción de petróleo no impidió que haya acuerdos para que ninguna jurisdicción pierda frente a un posible avance de la Nación. Así es que convinieron ser intransigentes con algunos propósitos expuestos en la Ley Ómnibus y reclaman que sea cada cuenca quien establezca las condiciones licitatorias.
Asistencia perfecta.
Si bien a la reunión de la OFEPHI realizada en el edificio del CFI en la Ciudad de Buenos Aires, no asistieron todos los gobernadores, se hicieron presentes representantes, y en el caso de Mendoza, el gobernador Cornejo participó de manera virtual, aunque de igual forma envió a la ministra del área, Jimena La Torre.
Rompiendo tradiciones
Es inédito, además, que los Gobernadores de las provincias productoras provengan de diversos partidos y orígenes, tema que impide contar con alguna posición unívoca frente al gobierno nacional.
Quien lidera esta liga es el gobernador de Neuquén, Rolando Figueroa, que ganó las elecciones enfrentando al histórico Movimiento Popular Neuquino, sin algún apoyo de las tres fuerzas nacionales que cuentan con más representación parlamentaria.
Hay que considerar que Neuquén aporta el 50% del petróleo que surge de Argentina, seguida por otra patagónica, Chubut, que genera el 20% aproximadamente y que hoy es gobernada por el joven Ignacio Torres, del PRO; Santa Cruz es la tercera provincia en su contribución de hidrocarburos, con un 10%, y también es gobernada por Claudio Vidal, precisamente un hombre proveniente de la Industria del petróleo, como líder sindical, y que también se impuso en las elecciones ganándole al histórico kirchnerismo. La cuarta productora es Mendoza, gobernada por Alfredo Cornejo, uno de los artífices de Juntos por el Cambio, proveniente del radicalismo. Estos cuatro Estados Provinciales aportan más del 90% de hidrocarburos.
Precios libres y bolsillos argentinos, secos.
Por otra parte, el sector privado se muestra exultante por los cambios que propicia el proyecto de Ley Ómnibus, en el que se prevé la desaparición del Estado como árbitro. De esta manera celebran que se quiten los límites impuestos para el abastecimiento nacional, liberando al 100% cupos para exportación y promoviendo la libertad de precios, algo inédito y de resultados imprevisibles para el desarrollo económico nacional, sin dudas, con fuerte impacto para los consumidores habituales pero además, por el traslado de esta "libertad" de precios de combustibles a toda la cadena de producción y transporte. Eso sí, según el sector, las inversiones serán del orden de 15 mil millones de dólares.