Deudores de créditos hipotecarios UVA , esperanzados

El titular del Juzgado Federal Nº 2 de Mendoza, Pablo Oscar Quirós, falló a favor de uno de los miles de damnificados por haber contraído un préstamo hipotecario en 2017, mediante el sistema UVA (Unidad de Valor de Adquisición) Uva venenosa Durante la gestión de Mauricio Macri al frente del ejecutivo nacional, se implementó un… Continúa leyendo Deudores de créditos hipotecarios UVA , esperanzados

El titular del Juzgado Federal Nº 2 de Mendoza, Pablo Oscar Quirós, falló a favor de uno de los miles de damnificados por haber contraído un préstamo hipotecario en 2017, mediante el sistema UVA (Unidad de Valor de Adquisición)

Uva venenosa
Durante la gestión de Mauricio Macri al frente del ejecutivo nacional, se implementó un sistema de créditos cuyo ajuste, además de la tasa nominal anual (3,5%) respondía a al incremento del coeficiente CER.

En el año 2017 se argumentó que con este modelo de empréstitos, muchas familias podrían adquirir no sólo su primera vivienda sino además coches cero kilómetros y otros artículos.

Pura transa
Para el caso específico de créditos hipotecarios, fue notorio que no hubo intención de desarrollar la actividad de las construcción (mecanismo óptimo para generar demanda de mano de obra e incremento de producción nacional) sino el de incentivar las transacciones inmobiliarias, ya que los requisitos para tomar un crédito hipotecario para adquirir una vivienda era mucho más sencillo que para la construcción de una nueva.

Según las cifras de hoy, más de 110 mil familias en la Argentina acudieron a las distintas entidades bancarias para tomar estos créditos (Tasa UVA), modelo de empréstito que se consagró en una Ley del Congreso de la Nación.

En el inicio de 2017, la Ley de Presupuesto previó una inflación que no iba a superar el 12%, luego un poco menos optimistas, dijeron que podría rondar el 15%, y con la promesa que iría disminuyendo gradualmente hasta no alcanzar dos dígitos.

El rotundo fracaso del programa económico del gobierno de Macri bien puede explicarse con los UVA. Primero en las tasas de inflación. 24,80% en 2017 o sea el doble de lo previsto y de lo que especularon los primeros tomadores de préstamos UVA; el 47,65% en 2018 y el 53,80% en 2019; luego en la incapacidad de generar empleo y de atraer inversiones.

Quirós, Quirós, qué grande sos
Este fallo del Juez Federal Pablo Quirós no es el primero, pero sí resulta ejemplar. Es contra la mayor institución crediticia del País, estatal. Obliga a retrotraer la situación de ajuste a 2019 y esto morigera la dramática situación de un caso puntual pero alienta al resto de los deudores a actuar colectiva o individualmente

Algo está fallando
El caso del fallo: el acreedor había recibido un préstamos por $2.300.000 (dos millones trescientos mil pesos)a pagar mensualmente durante 30 años. El valor de la unidad (UVA) era $17.26, hoy la deuda asciende a 22.500.000 (veintidos millones quinientos mil pesos),Hoy el valor del UVA es de $202,57.
Considerando que ya ha pagado durante 5 años. O sea, a pesar de haber pagado 60 cuotas de las 360, se incrementa la deuda pero el valor de la vivienda en absoluto asciende a la sideral cifra que adeuda.Lo que dictaminó el Juez Quirós es la readecuación, y que los ajustes sea según la movilidad salarial, no sobre el coeficiente CER

Porqué la intervención de la administración judicial.
El sistema de crédito bajo la modalidad UVA, tal como señalamos, obedeció a una Ley nacional, y la única posibilidad de que se modifique y corrija una Ley es mediante otra ley. Un decreto no alcanza. Ante la imposibilidad de pagar en tiempo y forma, pero además, sabiendo que el valor del bien no condice con la posibilidad de venta a valores de mercado, esta ley no tiene nada que envidiarle a la fatídica 1.050 de la dictadura.

Tus proyectos pueden esperar
En el congreso hay más de un proyecto presentado para modificar esta ley que tanta angustia y temor causa a decenas de miles de argentinas y argentinos. Una es del Diputado Julio Cobos y también el legislador de Mendoza José Luis Ramón ha trabajado para dar solución, pero el apuro es de los deudores, de quienes confiaron en las promesas y de quienes quizá ahora también deban acudir a tribunales para que sea posible, al menos, no deber más de lo que se tiene y no tener que vivir de prestado

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