Vino, cobre y agua: la puesta en escena del discurso del gobernador Alfredo Cornejo
"Hagamos cobre, hagamos vino y cuidemos el agua" manifestó el gobernador Alfredo Cornejo en su discurso.
Con un fuerte mensaje para activar la minería en Mendoza, el gobernador Alfredo Cornejo brindó su segundo discurso de su actual gestión, en la Legislatura Provincial, dando comienzo al 185º Período Ordinario de Sesiones.
El discurso comenzó con un saludo a la comunidad católica por la muerte del Papa Francisco, y continúo haciendo énfasis en los principales ejes de gestión, destacando siempre lo que tiene al "alcance" y lo que no depende de la provincia, sino de la Nación.
De esta manera, dejó ver entre líneas que mucho depende de lo que pasa económicamente con el gobierno de Javier Milei, ante un escenario de crisis social y económica que atraviesa la Argentina:
"A la vocación por el orden que, en rigor, es la marca registrada de mi Gobierno, le estamos agregando una nueva generación de reformas profundas en la medida que la macro economía va dando señales de recuperación", aseguró el Gobernador.
"Bajar la inflación, reinstalar una idea de orden público, sanear las cuentas fiscales, comenzar a desmantelar la telaraña regulatoria, racionalizar la estructura estatal e ir saliendo del cepo cambiario son algunas aristas necesarias, aunque no suficientes, que marcan una dirección esperanzadora y nos abren un nuevo marco de posibilidades".
La casa aún no está en orden, sin Uspallata
En su intento de consolidar la minería en Mendoza, el gobernador destacó que en su primer mandato trabajó para poner "orden en la provincia", y así en esta segunda gestión le dará paso al progreso:
"El objetivo del primer mandato fue poner la casa en orden. Sin orden, no hay inversión, no hay seguridad, no hay educación. Lo entendimos antes que muchos y lo hicimos sin miedo. En este segundo mandato, nos hemos propuesto abrir la casa al progreso. Y la minería será el motor de ese progreso. Un progreso que respeta el agua, respeta el medioambiente y respeta a las próximas generaciones", dijo.
Sin mencionar al proyecto San Jorge en Uspallata, dejó claro que para su gestión económicamente funcione debe haber minería, y ante una puesta en escena con una piedra de cobre, una botella de vino y una copa de agua, arengó:
"Hagamos cobre, hagamos vino y cuidemos el agua"
De esta manera apuntó que el cobre del futuro para Mendoza está en Uspallata, y no en Malargüe, y con pierda en mano dijo:
"Este producto puede darle riqueza a Mendoza. La riqueza que le hace falta".
Luego indicó que el cobre "puede contribuir al mundo en la electromovilidad. Tiene una demanda internacional para las próximas décadas que es clave. Puede hacer próspero a Mendoza".
Luego mostró una botella de vino:
"Este producto no debe ser incompatible con el vino".
"Somos reconocidos internacionalmente por esto, somos premiados en el mundo, nuestra marca indeleble la produce esta maravillosa industria, la más competitiva", expuso Cornejo.
"Queremos tener el mismo prestigio y el mismo cuidado ambiental que tuvimos para esto, con este producto", aseguró, volviendo a elevar la piedra ante la mirada de la platea política. "Queremos ser reconocidos como grandes productores de cobre para nuestro planeta".
Obviamente el momento que tuvo el gobernador fue aplaudido por los propios, y traerá repercusiones en una provincia con una marcada defensa de vecinos y asambleístas de Mendoza que dijeron que el "Agua de Mendoza no se negocia".