La Lógica del Escorpión: el lanzamiento que marca el regreso de Charly García
Hace más de cuatro años que Charly viene armando, nota por nota, su nuevo álbum, que finalmente verá la luz este 11 de septiembre, Día del Maestro. Charly construyó un concepto durante la grabación, combinando música y cine. Charly, no nos debe nada, pero lo cierto es que casi todos se acercan a un nuevo disco de él con algo de temor.
Hoy sale a la venta el nuevo álbum de Charly García: La lógica del escorpión.
Esta producción ya está disponible para preorden en formato digital a través de la plataforma Spotify.
El trabajo está parcialmente inspirado en la fábula budista "La rana y el escorpión".
¿Por qué elegiste la fábula de la rana y el escorpión para conceptualizar el disco?"Porque los escorpiones no tienen lógica y prefieren suicidarse antes que los maten. La rana, en cambio, tiene lógica, aunque en esta ocasión no le sirvió mucho".Durante la pandemia, García empezó a grabar bases y a incorporar algunos samples en canciones que venía trabajando hace un tiempo, mientras se gestaba la idea de un nuevo disco. En octubre de 2020, con las primeras aperturas post-pandemia, Charly llamó a Matías Sznaider, un joven ingeniero de sonido con quien ya había trabajado en vivo: "Charly está decidido a grabar el disco", le dijeron.
Sznaider cuenta que su trabajo consistía en destacar lo más representativo de las ideas de Charly y llevarlo al frente: "Charly tenía claro cómo debía ser el disco desde el primer día".
Con una base de canciones armadas, los músicos amigos comenzaron a acercarse al estudio. Como en Random, Samalea fue el primero en llegar. Para después incorporar a Kabusacki al grupo. Charly grabó varios bajos, guitarras y teclados, incluyendo su histórico Yamaha CP-70, que compró en 1978 para el debut de Seru Girán. Su plan inicial era grabar todos los instrumentos él mismo, al estilo Prince. Aunque lo hizo en un principio, luego llamó a Sama y Kabu para reemplazar algunas baterías y regrabar las guitarras, con tal de sumarle calidad a las grabaciones.
La Lógica del Escorpión se terminó de grabar en diciembre de 2021: Se mezcló y masterizó en la primera mitad de 2022. Hubo varios trámites con la discográfica hasta oficializar su lanzamiento en abril de este año. Pero por fin está llegando.
Aunque grabaron 21 temas en total, solo 13 llegaron al corte final. Charly decidió priorizar la calidad sobre la cantidad, eligiendo cuidadosamente las mejores canciones. El álbum fue concebido desde el principio como un vinilo simple.
Charly había hecho del estudio Happy Together en Caballito su refugio
Ahí, con Tato y Sznaider, crearon una dinámica de trabajo fluida: Charly grababa, Sznaider editaba por la mañana y a la tarde revisaban juntos.
Sznaider cuenta que su trabajo consistía en destacar lo más representativo de las ideas de Charly y llevarlo al frente: "Charly tenía claro cómo debía ser el disco desde el primer día".
Con una base de canciones armadas, los músicos amigos comenzaron a acercarse al estudio. Como en Random, Samalea fue el primero en llegar. Para después incorporar a Kabusacki al grupo.
Charly grabó varios bajos, guitarras y teclados, incluyendo su histórico Yamaha CP-70, que compró en 1978 para el debut de Seru Girán.
Su plan inicial era grabar todos los instrumentos él mismo, al estilo Prince
Aunque lo hizo en un principio, luego, para sumar calidad a las grabaciones, llamó a Sama y Kabu para reemplazar algunas baterías y regrabar las guitarras. Kabusacki, cuenta que fue llamado para grabar una guitarra y terminó tocando en nueve de los trece temas del álbum.
"El estudio se convirtió en un lugar de reunión, música y amistad", recuerda.
En el estudio, Charly se colocaba delante del piano Wurlitzer y el teclado Korg Kronos, con su copa de Baileys en mano, bromeando o debatiendo sobre música, mientras pasaba de guitarra a bajo.
Pero a pesar del ambiente relajado, la grabación fue siempre profesional, bajo la dirección y las propuestas de Charly. Todo el álbum tiene el sello García, riguroso hasta en el orden de los temas. Charly solía encontrar inspiración en su iPad o viendo algo en YouTube. Durante las sesiones haciendo collages con pedazos de diferentes canciones y películas. Samalea describe cómo Charly construyó un concepto durante la grabación, combinando música y cine, influenciado por directores como Kubrick, Fellini y Woody Allen.
Bajos profundos y ritmos que arengan
Samalea se enfocó en darle a la batería el toque justo para mantener el groove. La Lógica del Escorpión se terminó de grabar en diciembre de 2021: Se mezcló y masterizó en la primera mitad de 2022.
Hubo varios trámites con la discográfica hasta oficializar su lanzamiento en abril de este año.
Algo de la historia de Charly
Cuando en 1971 irrumpió en la escena argentina el grupo folk Sui Generis, liderado por Charly García y Nito Mestre, generó un fenómeno de ventas que visibilizó a una generación de músicos que definieron el rock argentino. Tal como relató en diversas oportunidades el productor de su primer disco Vida, y líder de su propia banda Billy Bond: "Se grabó en dos días y vendió 400 mil discos en una época donde los únicos que vendían tanto eran Palito Ortega o Sandro".
A lo largo de los años, los cambios musicales y personales de Charly García han sido vistos como un reflejo de Argentina, un paralelismo que, en gran medida, se ha cumplido.
Queda por ver si el país, gobernado por la ultraderecha, tendrá algún eco en este nuevo álbum que será lanzado hoy, 11 de septiembre, una fecha con varias connotaciones históricas: el Día del Maestro en Argentina, el aniversario del golpe militar en Chile, y el recuerdo de la caída de las Torres Gemelas en Estados Unidos en 2001. Después de ese año, cuando en Argentina estalló una profunda crisis política, el barrio de Palermo empezó a transformarse, impulsado en parte por los medios de comunicación y en mayor medida por el turismo derivado de la recesión. Fue entonces cuando sectores del barrio comenzaron a llamarse Palermo Soho o Palermo Hollywood. Charly García, siempre original, acuñó su propio término: Palermo Bagdad.
Frentero, descarnado y honesto, Charly encuentra el modo de disolver los temores por su actualidad física con un disco convincente.
Así describe el disco, La Lógica del Escorpión, el periodista Eduardo Fabregat, de Página|12.
Charly García y los '80
En esta conexión entre la realidad argentina y los discos de García, los 80 resultan una década fascinante, con la Guerra de Malvinas y el retorno de la democracia en un corto periodo. En referencia a la guerra, García escribió No bombardeen Buenos Aires, en la que con su característico humor ácido cantaba: "Si querés, escucharé a la BBC/ aunque quieras que lo hagamos de noche".
También capturó el espíritu de la época con Serú Girán, junto a Oscar Moro, David Lebón y Pedro Aznar, en No llores por mí, Argentina, un tema que, por su tono, bien podría haber sido compuesto en septiembre de 2024: "Entre lujurias y represión bailaste los discos de moda y era tu diversión burlarte de los ilusionistas. Estás enferma de frustración y en tu locura no hay acuerdo una hiena al reír, pero al almuerzo con los cerdos."
La etapa solista de Charly coincidió con una apertura democrática marcada por los ecos de la represión, pero también con un aire de liberación. Esto se refleja en canciones como Raros peinados nuevos, que capturan la rareza de los nuevos hábitos culturales luego de una dictadura tan brutal. Este "nuevo aire" representado, entre otros, por Virus, significó algo más que un cambio estético y musical: fue una renovación social.
Durante los años 90, García fue blanco de los medios de chismes y espectáculos, que se alimentaban de su errático comportamiento y su consumo de drogas, sobre todo cocaína. Esta dualidad amor-odio con la prensa lo convirtió en una figura impredecible y un objetivo fácil para los diarios, aunque no dudaba en devolver el golpe, ya fuera físicamente o con su lengua afilada. En esos años invirtió el lema de una campaña moralista: "¿Sol sin drogas? Drogas sin sol".
Su etapa Say No More estuvo llena de gestos provocadores, como la frase: "La entrada es gratis, la salida vemos".
Durante ese tiempo, García se inspiró primero en Kurt Cobain y luego en Marilyn Manson. En esa época, criticar a Charly dentro del periodismo musical era un tabú, similar a cuestionar la poesía de Spinetta o el compromiso social de León Gieco. Sin embargo, fue el propio García quien empezó a desmantelar su propio mito. En esos años, no era difícil ubicar su departamento por el graffiti en su balcón, y los empleados del videoclub vecino no dudaban en compartir su número de teléfono como castigo por no devolver las películas a tiempo. Curiosamente, en esa época, nadie aspiraba a ser "el próximo Charly", su figura ya había sido colocada en un olimpo inalcanzable; aunque llegar a la puerta de su casa no era tan complicado.
A comienzos de los 2000, asistir a un concierto suyo era toda una experiencia: desde verlo destruir un piano con un hacha hasta hacer que miles de fanáticos se agacharan en un gesto de adoración. Estos shows solían terminar con una superposición de símbolos como la esvástica, la estrella de David y el signo del dólar.
Luego, el silencio. Charly fue internado en una clínica de rehabilitación, bajo la tutela de Palito Ortega, actor y músico cristiano conservador. La imagen resultaba llamativa: un ícono de la rebeldía bajo el cuidado de una figura asociada con la dictadura.
Finalmente, reapareció con su disco Random en 2017.
Canonizado
En 2021, cuando García cumplió 70 años, los principales homenajes se realizaron en el Centro Cultural Kirchner (ahora denominado Palacio Libertad) y en el icónico Teatro Colón. En este último, Fito Páez, ex compañero de banda de Charly, fue el encargado de interpretar su repertorio. En el CCK, varias de las formaciones históricas de García se reunieron, con el propio Charly haciendo una inesperada aparición en el escenario, en lo que fue un momento más emotivo que artístico, dadas sus complicaciones de salud.
Los seguidores de García esperan su nuevo disco
Para muchos, adquirir un álbum suyo es una experiencia nostálgica que los transporta a diferentes etapas de sus vidas. Según se ha filtrado en redes, durante una escucha privada para periodistas, se supo que la banda incluye al baterista Fernando Samalea y al guitarrista Kabusaki, quienes han trabajado con él en varias ocasiones.
El álbum contará con un nuevo cover de The Byrds, So You Want to Be a Rock 'n' Roll Star, y el arte de tapa será obra de Renata Schussheim, quien ya colaboró con García en 1982.
Las canciones El club de los 27 y Medicina 9 contarán con la participación de David Lebón, mientras que en América colaborará Pedro Aznar.
Además, se rescata una composición junto a Luis Alberto Spinetta, La pelícana y el androide.
Para muchos, Charly García es uno de los pocos capaces de escribir versos inmortales como: "Esta canción durará por siempre / por eso mismo yo la hice así / una canción sin amor / sin dolor / la canción sin fin".