LA INSJUTICIA Y SUS FORMAS

Las fallas en los fallos, el juego perverso de la Justicia que debe alertar a todos y a todas

Las condenas erradas es una preocupación en todo el mundo. Un caso emblemático conocido hace poco y la situación de la Justicia en Mendoza, que mete miedo. La causa contra Cacho Garay y el extraño extravío

Existe un día para luchar contra las condenas erradas, la falta de garantías y las arbitrariedades del poder. Es hoy

La historia y la literatura deberían ayudar para evitar que, so pretexto de impartir Justicia, se condene a inocentes, se encierre a personas decentes y se castigue "por las dudas", sin embargo, la devoción por inculpar y someter suele superar a la reflexión madura, ayudada por los instigadores ocasionales, desde los medios y desde los círculos de poder

Una pena, tantos casos

Días atrás se conoció un caso estremecedor. Japón es uno de los dos países llamados desarrollados que tiene vigente la pena de muerte. Iwao Hakamada fue declarado culpable, en 1968, de haber asesinado a su jefe y a toda la familia del mismo. El arduo trabajo de su hermana, convencida de la inocencia, permitió que hubiese apelaciones para impedir la horca de su hermano. En el tercer juicio, un tribunal nipón absolvió a Hakamada luego de constatar que las pruebas aportadas habían sido fraguadas. Más de medio siglo padeció el escarnio de la prisión y el terror de saber que iba a morir condenado siendo inocente. La absolución a sus 88 años y su actual condición de libertad total no podrá compensar la crueldad de las falacias

Un hito de tribunales parciales

Probablemente el "Caso Dreyfus", aquél capitán francés condenado y exonerado, sea el más emblemático y la carta del escritor Émile Zola titulada "yo acuso" el argumento mejor expresado en defensa de un inocente sentenciado por la traición que no había cometido, pero son muchos los casos que existen más cerca en la geografía y en el tiempo, y debería involucrarse más gente, porque nadie está eximido de los fallos y las fallas de los mismos

La fórmula invertida

En 2012 en Argentina, impulsada por el cineasta Enrique Piñeyro, se creó Innocence Project Argentina tomando el modelo de Innocence Project de Estados Unidos. Estas entidades tienen por objeto esclarecer y liberar a personas encarceladas indebidamente y condenadas erróneamente, aunque en Estados Unidos se concentran en los condenados a la pena capital, pena que en Argentina fue erradicada hace más de 40 años. Asimismo la labor que tienen es ardua porque los casos inicuos, abundan

Acá, no más

En Mendoza, además, es notorio que se ha invertido la "fórmula Blackstone", aquella que dicta que es mejor que 10 delincuentes estén libres a que un sólo inocente padezca el encierro. La actualidad carcelaria mendocina opta por el sentido contrario, esto explica la cantidad de personas privadas de su libertad sin condena en los centros de detención y en prisión domiciliaria, suerte que no corren los extranjeros, ni rugbiers ni turistas, una nueva clasificación no publicada del derecho mendocino

De mal humor

Hace pocas horas, en el sitio informativo digital "La quimera" se publicó un fragmento del video de una de las audiencias, ampliación de indagatoria, en el que se puede ver y escuchar la declaración de Cacho Garay, en la que devela cuestiones que comprometen al poder político y empresario vernáculo. Con la firma del propio director del medio digital, Ariel Lareu Da Peña, cuenta y explica la posible vinculación directa de esta causa con el ex gobernador mendocino, su esposa y un empresario del rubro automotriz. Esa relación inequívoca -hace algunos días fue citada la esposa del actual senador- podría explicar el porqué del cambio de fiscal no bien se iniciaba el proceso, la extraña desaparición de una primera y extensa declaración de la denunciante, el letargo para abrir el teléfono móvil aportado por el propio Cacho Garay y el motivo por el que demoran la incorporación de pruebas aportados desde la defensa

Inconsistencias y contradicciones que atemorizan 

Que por otorgar protección a presuntas víctimas se apresuren en detener a los probables victimarios, está en el marco de lo razonable, siempre que exista una denuncia verosímil y al menos algún indicio sobre la ocurrencia del crimen. Pero que a petición de alguien, no prevalezca la presunción de inocencia, se detenga y se encierre a una persona, contradice todo propósito del Derecho. Que luego, mientras espera el desenlace del proceso, no le sea dada la posibilidad de prisión domiciliaria o, peor, se le otorgue y luego se le quite con idéntica discrecionalidad, exige poner en guardia a quienes deben ofrecer garantías.  

¿Cómo puede ser?

Según expresa Cacho Garay en esa ampliación y reclama, se extravió, perdió, esfumó, borró más de una hora de una primera declaración de la denunciante. La respuesta que ensayan desde la fiscalía es casi esotérica y con evidente desconocimiento de cuestiones elementales, ya que el rescate de un documento para un técnico informático es habitual y usual. Precisamente en esa declaración "desaparecida" fue cuando la denunciante mencionó al empresario automotriz, al ex gobernador y actual senador y a la esposa de este último. Borrada esa primera declaración, según pretenden explicar sin intención, en la segunda oportunidad omite menciones a alguno de los antes delatados, o sea, junto a la pérdida súbita e inexplicable de un documento informático, se perdió la memoria de la denunciante y algún nombre. Hay quienes podrán sospechar, en cambio otros, pueden estar absolutamente seguros. La casualidad no es tan generosa con la política y el azar suele ser un grave problema para la ludopatía, no para la justicia

Teléfono para las autoridades

Este lunes, en conmemoración del Día Internacional para la erradicación de condenas erróneas y a la vez, jornada propicia para reflexionar sobre los daños que provocan las falsas denuncias, desde la Asociación Verdad y Justicia, convocan a quienes puedan asistir para sumar voces, también para que no avancen con el propósito de prohibir el uso de teléfonos móviles a las personas que esperan sus procesos judiciales detenidos

La trampa de la lengua

La razón para la existencia de un sistema que provea "justicia" es la de defender a inocentes, prevenir el delito e impedir que cada cual actúe sin contemplar los derechos del prójimo, esto que resuena elemental por lo obvio es lo que no ocurre. La polisemia de la palabra fallar es una trampa. Los jueces deben fallar sin fallar y la sociedad -dentro de ella los medios y quienes ejercemos el oficio periodístico- no. No podemos seguir fallando

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